Valladolid, que ha vuelto a superar la barrera de los 300.000 habitantes, es una ciudad perfecta para vivir. También lo es para visitar. Son decenas los turistas que visitan la ciudad del Pisuerga, sobre todo el fin de semana, y se quedan prendados con toda la belleza patrimonial e histórica que esconde un municipio único.

Vecinos y turistas recorren las céntricas calles de la ciudad y se paran en los diferentes establecimientos hosteleros, con una oferta grande y variada, para disfrutar de los mejores pinchos o de un buen vino, dentro de una provincia con un amplio elenco de denominaciones de origen y con unos caldos que quitan el sentido.

Precisamente, el pasado 28 de diciembre de 2023, hace apenas un mes, abría sus puertas The Macanudo. Un espacio único, ubicado en la calle Vicente Moliner, muy cerca de la Plaza Fuente Dorada, en pleno casco histórico para volver a dar vida a una calle en la que muchos locales cerraron tras la crisis económica de 2008.

Un lugar donde comer, cenar o tomarte un cóctel que han decidido poner en marcha los empresarios: Joaquín Mielgo y Karina Paola Rico. Cuentan todos los secretos del local a EL ESPAÑOL de Castilla y León.

Imagen del local Fotografía cedida a EL ESPAÑOL de Castilla y León

La historia de los Dueños del local

Joaquín nació en Valladolid y se define como una persona “creativa, emprendedora y luchadora” con unos valores muy arraigados que fueron inculcados por su familia desde pequeño. Comenzó desde muy joven trabajando de Relaciones Públicas. Con amplia formación, ha pasado por agencias creativas. Ha trabajado como director de Mkt de una franquicia de restaurantes o en una multinacional negociando acuerdos y desarrollando marcas premium internacionales en la zona, además ejerció como director gerente en un local de hostelería en la ciudad del Pisuerga. Tiene su propia agencia de MKT y diseño. En 2012 fue Galardonado por los premios de Publicidad de Castilla y León.

Paola Rico nació en Colombia, concretamente en Cartagena de Indias. Lleva 18 años en España. Es una mujer “con las ideas claras, emprendedora y luchadora”, valores que también le fueron inculcados por parte de su familia. Desde antes de los 18 años ejerció como modelo y azafata. Acostumbrada a trabajar cara al público como organizadora de eventos, como asesora de imagen en una boutique de moda en el centro de Valladolid y como encargada de la tienda de una marca conocida en Puerto Banús. Hoy en día cuenta con su propia empresa del sector servicios.

Si todo esto no es poco en un currículum largo y extenso de nuestros dos entrevistados, el pasado 28 de diciembre de 2023, hace poco más de un mes, decidieron lanzarse a la aventura de abrir un nuevo restaurante en pleno centro de Valladolid que promete y que ya está haciendo las delicias de los clientes.

“La hostelería es ocio, donde el consumidor puede vivir una experiencia única. Este sector puede llegar donde otros no lo consiguen,  conectar personas, generar ilusión y hacer sentir especial a mucha gente. Generar un mundo paralelo a la monotonía del día a día con experiencias e impactos de marca sobredimensionados”, explica Joaquín, en declaraciones a este periódico.  

Un lugar único

La elección del nombre: The Macanudo, surge inspirándose en Paola dice Joaquin. “Buscábamos una palabra latina que tuviera un significado positivo.  Macanudo significa: bueno, magnífico, extraordinario, excelente, en sentido material y moral. Esa experiencia que queremos que vivan nuestros consumidores.

“Creemos que lo bueno procede de un estado salvaje, por ello el concepto macanudo está basado en esta creencia,  llevando esta fusión a la gastronomía a la coctelería y a las propias personas”, afirman.

El diseño elegante y sofisticado del local aúna el “espíritu rockero y corazón salvaje" utilizando colores, texturas de animal print y materiales nobles que representa el eslogan utilizado. Esta ambientación del local es muy personal y refleja, a las mil maravillas, la personalidad rebelde de los dueños.

Imagen de The Macanudo Fotografía cedida a EL ESPAÑOL de Castilla y León

La zona de arriba es tipo Gastrobar-Coctelería. La de abajo se trata de un restaurante y cuenta con una zona privada para eventos que está adaptada para personas con movilidad reducida. Además, cuentan con una Cava de Vinos para hacer una pequeña bodega.

“Presumiblemente, en las próximas fechas, contaremos con dos terrazas. Una en la misma calle Vicente Moliner y otra en la calle peatonal Matías Sangrador, con vistas a la Plaza Fuente Dorada y a la mismísima Plaza Mayor”, confiesa Joaquín, en uno de sus próximos objetivos.

Con esto, el local que se ubica en un lugar único y céntrico de la ciudad del Pisuerga, va a contar, sumando las terrazas, con 130-140 metros para deleitar a sus clientes con una copa, un refresco o las mejores elaboraciones. En la actualidad son seis los trabajadores que se esmeran por ofrecer el mejor servicio a todo el que llega.

En busca de enamorar al cliente con su cocina de fusión y el futuro

“Nuestra especialidad es la cocina de fusión.  Gastronomía  mediterránea con  pinceladas  internacionales (principalmente japonesa y Latinoamericana),  aromas y sabores exóticos,  vibrantes en el paladar., Aplicando  el mismo concepto a la coctelería. Todo ello incluyendo ese efecto “wow” que pueda sorprender a nuestros clientes”, explican los empresarios hablando de lo que ofrece el establecimiento hostelero.

Se apuesta por un servicio y un producto “de calidad” pero, sobre todo, por dar “una experiencia increíble, única y diferenciadora” al cliente que le mueva a repetir y a volver a The Macanudo, un local diferente y que sirve para ampliar la oferta de establecimientos hosteleros en la ciudad vallisoletana.

Tarta de queso casera al horno con tierra de galleta y frutos rojos. de The Macanudo Fotografía cedida a EL ESPAÑOL de Castilla y León

“Nuestra visión, que es más que un sueño, pasa por convertir The Macanudo en una marca sólida que se pueda replicar, llevar nuestra experiencia a consumidores de otros lugares de España y del mundo, pero somos realistas y vamos paso a paso.  Creemos en la humildad, en el trabajo y en la constancia, el objetivo principal es que los clientes se lleven una experiencia macanuda, bonita y diferenciada”, finaliza Joaquín.

Un restaurante que abrió sus puertas hace un suspiro y que promete hacerse un hueco entre la hostelería de Valladolid.

 

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