Era el pasado mes de enero de 2015 cuando una sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo obligaba al cierre de una de las salas de fiestas más queridas y recordadas por parte de los vallisoletanos.
Mambo bajaba la persiana, parecía que definitivamente en la calle San Felipe Neri de la ciudad del Pisuerga. Sumiendo en la mayor de las tristezas a los que disfrutaban en el lugar, pero, también, aliviando a unos vecinos que estaban hartos de los sonidos nocturnos en la discoteca.
El pasado 3 de mayo del 2024, EL ESPAÑOL de Castilla y León les informaba de que, nueve años después, se trabajaba para que la mítica sala de fiestas reabra sus puertas, eso sí, con un concepto diferente para sorprender a los más nostálgicos del lugar.
La promotora bajo la sociedad Mambo 2025 confirmaba a este periódico “su intención de reabrir el local con un concepto muy distinto” y dejaba claro que “no va a ser una discoteca” sino “un pub de copas con actuaciones en directo”.
Aseguraba que “quería orientarlo hacia un público más mayor” y confesaba que el proyecto “era presentado el 2 de mayo”. De hecho, apuntaba que “han tenido que hacer muchos estudios” para “constatar que su idea podía funcionar” y que “no iba a dar problemas a los vecinos”.
El pasado mes de mayo ante el Ayuntamiento de Valladolid, se presentaba la solicitud de licencia ambiental y el proyecto básico para la apertura de Mambo, bajo el mismo nombre, como un pub musical y un café cantante por la promotora.
Pedro Herrero, el portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Valladolid, aseguraba a través de la red social X que “está de vuelta el urbanismo del PP” y denunciaba que el consistorio “había permitido empezar estas obras sin licencia”.
Este periódico ha podido hablar con uno de los vecinos de la zona. De hecho, nos confirma que vecinos del bloque de Felipe Neri número 1, del 3 y del 5, y algunos del portal 12 y 16 de Teresa Gil, además del quiosco cercano, se han unido para evitar que reabra sus puertas.
“Elevamos un escrito de alegaciones tras la solicitud de la licencia ambiental. Planteamos que la salida de emergencia no es la más adecuada, que la salida de humos y de aires no da como para abastecer a tanta gente como la que se va a congregar en el lugar y que la solicitud de licencia ambiental no cumple con los requisitos”, asegura nuestra entrevistada.
Unas alegaciones que se presentaron ante el Ayuntamiento. Sin embargo, nuestra entrevistada añade que “este miércoles vieron como estaban sacando cosas del lugar” y que “este jueves estaban trabajando en el local”.
Nos asegura que “la licencia ambiental está sin resolver” y que “se presentó una DROU” para “comenzar a trabajar cuanto antes”. Como afirman varias fuentes los camiones están a las puertas.
“No digo que sea culpa de la discoteca, pero, en el pasado, comprobamos que atraer a mucha gente y la zona se llena de suciedad. No queremos volver a vivir la pesadilla del pasado”, añade la vecina.