Hace unos días, EL ESPAÑOL de Castilla y León les informaba de que el pasado 26 de agosto, el presunto asesino confeso del crimen de Mocejón había sido trasladado de la cárcel de Ocaña I a la de Segovia, como confirmaba Rafael Paniza, portavoz de la Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones.

Este periódico ha podido saber también, a través de fuentes penitenciarias, que David, el presunto asesino de India y Paloma, fue trasladado de la cárcel de Valladolid a la de Segovia, el pasado 13 de julio de 2024, y que se encuentra en el módulo de respeto.

El acusado, de Tudela de Duero, espera juicio con jurado por el trágico asesinato de Paloma, de 46 años y de su hija India, de solo ocho. Un juicio que se va a celebrar el próximo 11 de diciembre, en la sección segunda de lo Penal de la Audiencia Provincial de Valladolid.

El juicio, el 11 de diciembre

Las acusaciones, como ha podido saber este periódico, piden prisión permanente revisable y otros 25 años para David. La Fiscalía de Valladolid, además de las tres acusaciones particulares y la popular, que ejerce la Asociación Clara Campoamor, solicitan para el presunto autor de los hechos una pena de 25 años de cárcel por el asesinato a cuchilladas de su pareja, Paloma, y prisión permanente revisable por la muerte, con una idéntica calificación, de India, su hija de solo 8 años de edad.

Unas acusaciones particulares que representan a los familiares de Paloma y al padre de la pequeña, así como a la Junta de Castilla y León que comparecerán en el juicio del 11 de diciembre.

Por su parte, el abogado del acusado ha calificado la muerte de Paloma y de su hija India como dos homicidios. Pide 13 años de cárcel para él por la muerte de la pequeña y 12 años de prisión por la de la madre, como ha podido conocer este periódico de fuentes del caso.

Un suceso que conmocionó a Valladolid

El 23 de enero de 2023, el corazón de Valladolid se detenía.  “He hecho algo muy malo. He matado a Paloma”, confesaba David a su cuñado, tras cometer el crimen. Se le olvidaba, en esa conversación telefónica que se producía en la madrugada del domingo 22 al lunes 23 de enero, que también había acabado presuntamente con la vida de la pequeña India, la hija de su pareja sentimental.

El cuñado avisaba, de inmediato, al Servicio de Emergencias 112, sin concretar en qué lugar se hallaba el presunto autor de los hechos. La Policía Nacional le buscó insistentemente hasta llegar al 66 del Paseo Zorrilla. Los bomberos, tuvieron que levantar la persiana y romper una de las ventanas para acceder el piso, desde la fachada.

Una vez en el interior de la vivienda, lo que se encontraron los agentes fue estremecedor. En el salón de la vivienda hallaban el cuerpo sin vida de India, la pequeña de 8 años, con varias puñaladas en la espalda. En la cocina estaba el cadáver de Paloma, con más signos de haber sido acuchillada con arma blanca, en unos hechos que se habrían producido entre la 1.30 y las 3.12 horas de la mañana, cuando se recibía el aviso, ese 23 de enero.

En la cocina se encontraba David, de 46 años. El presunto asesino que se había autolesionado con arma blanca en el pecho y en las muñecas. Fue detenido y trasladado hasta el Hospital Clínico de Valladolid. Cuando salió de allí, se decretó su ingreso en prisión, a la de Villanubla que ahora ha cambiado por la de Segovia.

Ahora, espera el juicio.