El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha negado la vinculación del cese del presidente de Adif, Ángel Contreras, que se hizo efectivo el pasado viernes, con el 'caso Koldo'. "No tiene ninguna relación y lo quiero dejar claro", ha expresado.
El ministro ha realizado estas declaraciones durante su visita a las obras de la nueva estación intermodal de Valladolid, la cual busca impulsar el tráfico ferroviario de mercancías, y tras leer y escuchar "algunas cosas que no me han gustado nada y a través de las cuales se vincula la destitución de Ángel al frente de Adif con este caso".
En este sentido, Puente ha explicado que el cese de Contreras responde "a una iniciativa del Ministerio, que lo único que pretende es componer un equipo que funcione de conformidad con la estrategia que el Ministerio desarrolla". En definitiva, "una decisión estratégica de reestructuración del funcionamiento del gestor de infraestructuras Adif".
Puente ha aclarado que Contreras ni siquiera está emplazado como testigo en la causa del caso, ya que cuando se firmaron los contratos de mascarillas que se han convertido en el objeto principal de la investigación, él era el director de mantenimiento.
De hecho, se ha referido al ya expresidente como "un excelente profesional y técnico, con una trayectoria super contrastada en la casa". Si bien, el ministro de Transportes considera que "en este momento hace falta otro perfil para dar un impulso a la obra ferroviaria de nuestro país, pensando sobre todo en el usuario".
"Es un cambio que a mí me gustaría operar en Adif, no solo a través de la sustitución de su presidente, sino a través de la definición de una nueva estrategia. Por eso, vamos a implementar algunos cambios en la organización que nos lleven a esa situación", ha añadido.
Por todo ello, Óscar Puente ha aprovechado la ocasión para recalcar la importancia de "preservar y respetar la honorabilidad de las personas", al tiempo que ha pedido "por favor" que no se manche "gratuitamente el nombre de nadie".