Arroyo de la Encomienda es uno de los municipios de moda de la provincia de Valladolid. El que más crece, pasando ya de los 20.000 habitantes, con una tasa de paro y aumentando, día a día los servicios. Su cercanía a la capital de la provincia también influye.
Es un lugar perfecto para montar un negocio y asentarse. De hecho, son muchos los que, en las últimas fechas han apostado por la localidad para abrir el suyo y les va bien. Eso sí, a base de trabajo, esfuerzo y dedicación.
Un claro ejemplo es el Restaurante La Barbeeria, que se sitúa en la calle Severo Ochoa de Arroyo de la Encomienda y que abrió sus puertas en plena pandemia, el 6 de noviembre de 2020.
Comandado por tres socios, Javi, José y Lorenzo, charlamos con ellos para conocer la historia del local y su suculento cocido que ha sido incluido en la Guía del Cocido de la Diputación de Valladolid.
Historia
“Somos tres socios que tenemos una amplia experiencia en el mundo de la hostelería y que buscamos dar lo mejor a nuestros clientes para que, tras venir por primera vez, repitan, que es la clave de la hostelería”, confiesa, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, Lorenzo García Vega.
Él es una de las tres patas de la mesa del negocio. Salmantino, de 36 años, suma 20 en el mundo hostelero. Vive en Arroyo de la Encomienda y están a punto de cumplir cuatro años con La Barbeeria en pie. Todo, tras abrir en plena crisis del coronavirus.
Un local que se ubica en el barrio de Las Lomas. Una zona muy joven y que se encuentra en plena expansión. Cuentan, dependiendo de la temporada, con entre 12 y 15 trabajadores.
Un lugar que merece la pena visitar.
El cocido
“Contamos con dos propuestas desenfadadas. Por un lado, una parte de Street food, fast food o finger food, como lo quieras llamar, con platos para compartir, con croquetas y platos como el chilly crab, típico de Singapur, y otra con una zona de comedor, que nos permite jugar con arroces, carnes a la brasa, pescados y platos de cuchara”, explica.
Entre esas especialidades, el cocido se va imponiendo, poco a poca, a las hamburguesas, la carne a la brasa y demás. Es de tal calidad que ha sido incluido en la Guía de Cocidos de la Diputación de Valladolid.
“Nos parece una iniciativa genial. Para nosotros es un gran escaparate, aunque nos vamos haciendo mayores. Somos unos chavales haciendo cocido, la comida de las abuelas. Es un premio gracias a ellas”, añade.
Su cocido lleva buen producto. Tocino, jamón y sus huesos, morcillo, chorizo, costillas ibéricas, pollo, espinazo y morcilla. Sin olvidarnos del repollo, la patata, la zanahoria y, como no podía ser de otra manera, los garbanzos.
“Como particularidad, los rellenos, aunque está mal que lo digamos, salen buenísimos. Los hacemos con pan de brioche, jamón y chorizo. Servimos dos por persona, uno frito con el compango y uno cocido con la sopa”, añade.
Lo hacen con cariño y tiempo, claves de un buen cocido.
Futuro
“Nuestro cocido ha tenido una gran acogida esta temporada. No ha habido ni que esperara al frío. Por lo que vemos, los clientes se van satisfechos. Mucha gente pregunta por él. Cada jueves estamos dejando la olla vacía. A partir de noviembre lo ampliaremos también al martes”, asegura nuestro entrevistado.
Sobre el futuro, añade que el de la hostelería es “relativamente incierto” debido a la “subida de todos los costes” no solo para ellos, sino para el consumidor, que al final “ve como su gasto tiene que ser reducido en ocio”.
“Nuestro objetivo no es otro que hacernos fuertes aquí y poder seguir creciendo”, finaliza Lorenzo.