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Fresno el Viejo es un municipio vallisoletano que se ubica entre los ríos Lanzón y Trabancos. Como sus riberas estaban pobladas de fresnos, de ahí viene su nombre.

Por la localidad atraviesa un ramal de la calzada real o cordel de la mesta, por la que afluía el abundante comercio que procedía tanto de Extremadura como de Andalucía hacia las ferias medinenses.

Allí destaca la Iglesia de San Juan Bautista en un municipio que se ubica a más de 50 minutos en coche de la capital de provincia y que cuenta, en la actualidad y según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), con una población de 854 habitantes.

Allí están de enhorabuena porque cuentan, desde el pasado 1 de noviembre, de nuevo con la Discoteca Ecus.

“La última licencia que se dio para la explotación de esta discoteca fue en el año 2013. Calculo que cerraría unos dos años después. Lleva cerrada un poco menos de 10 años”, asegura, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, Luis Miguel Muñumer, alcalde de Fresno el Viejo.

El encargado de ponerla en marcha de nuevo es Abel Zurdo, un joven de 28 años que suma 10 en el mundo hostelero. Charlamos con él.

La vida de Abel

“Mi vida ha sido como la de cualquier persona de clase media. Desde bien pequeño comencé a buscarme la vida para no depender de mi familia. Empecé cogiendo, con mi familia, el quiosco del pueblo y después cogimos el bar de las piscinas de Fresno, donde estuve cuatro años mientras estudiaba”, nos explica Abel Zurdo.

Posteriormente cogería el solo dicho establecimiento hostelero antes de irse a vivir a Tenerife. Volvió, retomó los estudios que tenía empezados, los termino y empezó a trabajar en un taller de soldadura.

“Este pasado verano cogí, junto con mi novia, el bar de las piscinas de Madrigal, y cuando acabamos la temporada me puse al lío de abrir la discoteca”, afirma.

Después de trabajar en el campo, en esos talleres de soldadura y en los negocios hosteleros, se pone al frente de la Discoteca Ecus, ni más ni menos.

Mucho tiempo con el sueño

Nuestro entrevistado, chico humilde, amigo de sus amigos, trabajador y muy luchador, asegura que “llevaba mucho tiempo queriéndola abrir”, pero no fue hasta este año cuando decidió dar el paso y comenzar con los trámites.

Estuvo abierta hace mucho tiempo. Yo calculo que más de 8 años, y siempre he tenido el gusanillo de ponerme al frente de ella. Cosa que he conseguido el pasado 1 de noviembre cuando reabrió sus puertas”, nos confiesa.

La Discoteca Ecus, que ha vuelto a la vida, se ubica en la Calle Pepe Zorita de la localidad pucelana y pone ritmo ya, desde el pasado fin de semana en Fresno el Viejo.

Para pasárselo bien

“Espero que la Discoteca Ecus sea un lugar donde la gente pueda pasárselo bien. Por la zona no hay ninguna más. Espero, sobre todo, que a la gente le guste y disfrute en la mejor compañía”, apunta.

Qué mejor plan que visitar Fresno El Viejo, pasear a través de su naturaleza o disfrutar con alguna de las múltiples actividades culturales que organizan a lo largo del año para después pasarse por la Discoteca Ecus y tomarse un refresco.

“Mi deseo es poder seguir con este proyecto adelante y compaginarlo con mi trabajo, siempre”, finaliza.

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