El arzobispo de Valladolid envía un mensaje de esperanza y fraternidad en Navidad
- Luis Argüello desea una “alegre y santa Navidad” a los “solos o tristes”, los que están en hospitales, residencias y prisiones o “deambulan por las calles”.
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El arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, compartió hoy un mensaje lleno de esperanza y solidaridad al desear una “alegre y santa Navidad” especialmente para quienes atraviesan momentos difíciles en estas fechas.
“Para aquellos que en estos días están especialmente solos o tristes; para los que se encuentran ingresados en hospitales, residencias de mayores, en centros penitenciarios o para los que deambuláis por las calles”, expresó.
También extendió su felicitación “a cada una de nuestras familias, especialmente a las que tienen algún dolor, porque precisamente, la Navidad es el tiempo del Dios con nosotros, de la Palabra que se hace carne, de Jesús que nos salva”.
El mensaje de Navidad de Argüello, recogido por Ical, destacó el significado profundo de la celebración: “El salvador se hizo carne hace 2025 años para poder mirar con ojos de hombre, pensar con inteligencia humana, trabajar con manos humanas y sobre todo amarnos con un corazón de hombre”.
La felicitación tuvo lugar desde la Basílica Santuario del Corazón de Jesús en Valladolid, un lugar que, como señaló el arzobispo, será declarado "jubilar" en 2025 con motivo del Año Santo Peregrino de Esperanza. “Para que podamos acudir a esta fuente de misericordia, para ponernos ante el Señor que nos mira, poder experimentar ese toque suave que nos levanta, nos cura, nos hermana...”.
Argüello invitó a reflexionar sobre el misterio de la Encarnación, afirmando: “Gracias a la encarnación, el Señor nos mira y sabemos que su mirar es amor, el Señor nos toca, y su tacto cura nuestras heridas, y nos levanta y nos reanima”. Con este mensaje, animó a todos a “peregrinar con esperanza y ser signo de la esperanza del Señor, porque él está con nosotros”.