El quiosco de Santa Lucía
Adiós a un mítico quiosco de Valladolid tras más de 20 años de historia: Jesús y Pilar se jubilan
- Tras buscar comprador, sin éxito, a finales de diciembre bajaron por última vez la persiana de un conocido negocio.
- Más información: Se vende por jubilación un mítico quiosco: “Ahora toca disfrutar”
Era el 16 de julio de 2023 cuando EL ESPAÑOL de Castilla y León les informaba de que Pilar San Emeterio y Jesús Palacio ponían a la venta el quiosco que se ubicaba en la calle Santa Lucía. Todo con el fin de encontrar un comprador. Allí, en naranja, se podía leer el cartel de ‘se vende’.
Pilar confesaba que “comenzamos con el quiosco con la llegada del euro”. En un principio lo hicieron su marido y hermano, aunque este último se jubiló y fue cuando ella se adentró en el quiosco para ayudar a su marido. “Es un negocio familiar que, durante mucho tiempo, ha dado de comer a dos familias”, apuntaba nuestra entrevistada.
“Lo vendemos porque nos queremos jubilar. Sigue funcionando, no como antes, pero tiene mucho paso y tránsito de gente y contamos con una clientela maja. La zona es magnífica para comenzar una nueva aventura”, apuntaba la pareja.
Un quiosco que lleva existiendo, prácticamente, toda la vida. Antes se encontraba en medio de la Plaza Luis Braille, hasta que cambiaron a la que hasta hace pocos días era su actual ubicación, frente a la sede del PSOE de Valladolid.
Tras más de un año buscando comprador, finalmente, el pasado 30 de diciembre, Pilar y Jesús tuvieron que bajar, por última vez, la persiana de su negocio.
Pilar en su quiosco
Una historia de más de 20 años
“En el año 2001 nos surgió la oportunidad de comprar el quiosco de Santa Lucia. Al ser un desembolso importante lo compré junto a mi hermano. Es cierto que se ha ganado mucho dinero con los quioscos. Venta de tabaco, prensa… nosotros no hemos conseguido entrar en esa etapa de abundancia, pero no nos ha faltado para mantener a dos familias”, explica Jesús.
Nuestro protagonista nació en Valladolid. Concretamente en el barrio de La Rondilla. Sus padres llegaron de Cantabria. Tenían una lechería y ahí trabajó toda la vida hasta que se casó y comenzó a trabajar para una empresa de transporte. Hacía ruta nacional por lo que estaba poco tiempo en casa.
Fue en la entrada del nuevo siglo cuando llegó esa oportunidad de un quiosco que “siempre ha funcionado muy bien” con “clientela fija” y con una historia de más de 20 años con Pilar y Jesús al frente.
“Nos pilló el cambio al euro y fue un jaleo de la leche. Cobrar en pesetas y devolver en euros. Hay que reconocer que todo el contenido digital nos ha perjudicado. Se dejaron de vender muchos periódicos y revistas”, añade Jesús.
“Nos da mucha pena que, de momento, nadie siga”, asegura Jesús tras completar con Pilar su jubilación y cerrar sus puertas el pasado 30 de diciembre de 2024.
“Funcionaba muy bien con la venta de periódicos, cargas de teléfono, carga de bonobús y demás, pero entendemos que es un negocio muy esclavo. Tienes que estar de lunes a domingo con un amplio horario. Ese el es principal motivo de que estén cerrando tantos quioscos”, finaliza Jesús.
Un quiosco más que dice adiós en Valladolid.
