El trabajo constante y coraje dieron sus frutos (33-28)

Y llegó. Después de mucho trabajo, esfuerzo y coraje llegó la victoria, el triunfo con su afición, la alegría, la satisfacción de que el trabajo bien hecho tiene recompensa. El Ángel Nieto se convertía en un fortín pistacho este sábado con las gradas repletas de zamoranos para animar y empujar al MMT Seguros en su primera final. Sí, una final que se jugaba en noviembre y que el equipo pistacho quería ganar para dar un golpe de autoridad sobre la mesa.

Desde el primer minuto los de García Valiente salieron con una marcha más, estaban rápidos, eficaces y el balón rodaba con mucha facilidad. Los pistachos dominaban el partido y eso se notaba en la grada. La afición empujaba entusiasmada a su equipo para esta vez sí, llevarse la victoria. El conjunto zamorano estuvo prácticamente todo el partido por delante en el marcador con un Octavio como director de orquesta que dirigía al equipo y una gran defensa y ataque que no cedía nada al BM Cangas. Pero los gallegos espabilaron, los zamoranos realizaron alguna pérdida de balón y eso, sumada algún error puntual, hacían que los gallegos empatasen el partido. Pero a falta de un minuto, el MMT Seguros se venía arriba no dejando escapar el partido y una jugada de Da Silva lograba irse al descanso con un gol por encima (16-15).

Tras el descanso, los de García Valiente dominaban el partido, Ceballos llegaba y marcaba, y Calle estaba intratable salvando las ocasiones de los gallegos. Todo funcionaba en el MMT Seguros y el BM Cangas no era capaz de atravesar el muro defensivo pistacho. La grada no dejaba de gritar con emoción, alegría, demostrando que el conjunto zamorano pase lo que pase, lucha, no se rinde, no se debilita ante las adversidades sino que se crece y así fue. Los minutos pasaban, el MMT Seguros tenía el partido controlado y con una amplia diferencia de goles. Así, el árbitro pitaba el final y la afición era una auténtica locura llena de emoción al igual que los jugadores que veían como las lecciones de trabajo constante, esfuerzo y coraje se veían recompensados este sábado (33-28).