Del Olmo propone un programa para reindustrializar Benavente
La consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, ha propuesto la creación de sendos programas territoriales de fomento para Béjar, en Salamanca, y Benavente, en Zamora, con el objetivo de reindustrializar estas dos zonas y sus áreas de influencia desde el reconocimiento que han perdido actividad y empleo industrial.
Este es el principal anuncio que ha realizado Del Olmo en su comparecencia a petición propia este miércoles en la Comisión de Economía y Hacienda de las Cortes en la que ha informado de los planes territoriales de fomento previstos en el acuerdo entre la Junta y los grupos parlamentarios para reindustrializar Castilla y León.
Según ha precisado, en el caso concreto del plan territorial de industria para Benavente y su entorno se iniciará este año mientras que el análisis del de Béjar y su zona de influencia, "la punta de lanza del sector textil de Castilla y León", comenzó en diciembre.
En el caso concreto del plan para Béjar se tiene en cuenta su situación geográfica periférica y su cercanía a una comunidad que todavía tiene consideración de región menos desarrollada en Europa por lo que el grupo de trabajo va a analizar el impacto de una crisis que, en palabras de la consejera, ha sido más intensa que en el conjunto de la provincia y la Comunidad.
"En estos años de crisis económica la degradación laboral de Béjar es hasta 10 puntos superior a la media de la provincia", ha reconocido Del Olmo que ha evidenciado también la pérdida gradual de industria local en esta zona que ha derivado en un cambio del modelo productivo hacia la actividad de servicios. La "altísima tasa de paro" de la zona y la tendencia negativa que presenta hacen necesario, según la consejera, plantear un programa de fomento de la actividad para este territorio.
En el caso de Benavente, Del Olmo ha apelado a su ubicación estratégica como nudo logístico del noroeste de España y ha recordado también los cierres de industrias locales con "gran incidencia en la economía comarcal", como Tablicia de Villabrázaro, que se clausuró en 2012 y llegó a contar con más de 100 empleados en el sector forestal, y World Wide Tobacco en Benavente, que cesó su actividad en 2011 con 90 trabajadores.
"Todos estos cierres en los años más profundos de la crisis han generado un proceso de depresión económica e industrial en una zona que se consolidó como uno de los ejes logísticos y de actividad más importantes de la provincia de Zamora", ha explicado Del Olmo, que ha anunciado que ya se han mantenido los primeros contactos con responsables de Zamora 10 para reforzar la coordinación en este asunto "de interés para la provincia y la Comunidad".