En la cabeza de José Chimeno, presidente de la asociación El Medero, se barrunta la necesidad de contar la historia de todas esas mujeres que viven casi ocultas en pueblos semiolvidados de la Baja Sanabria. Movido por un deseo de darles voz, José se pone en contacto con la productora zamorana Konsak, formada por Jose Berodas (realización), Nacho Rodríguez (director del documental) y Mikel Sastre (montaje y posproducción). Y así nace 'Argaña', el documental que cuenta la historia de estas mujeres, que vivieron en una Sanabria medieval, sin servicios mínimos propios del siglo XX; en cuyas vidas la llegada de la luz y de las presas fue un hecho histórico y que hoy recuerdan una vida de trabajo sin descanso con una sonrisa y grandes lecciones para la actual sociedad.

El documental 'Argaña' se estrena este viernes en el Ayuntamiento de Puebla de Sanabria, como una actividad más de la gran oferta del Verano Cultural. Hoy, hablamos con dos de sus creadores para ser conscientes de lo que estos testimonios pueden aportar a nuestra realidad.

¿Qué queréis contar con 'Argaña'?

Nacho R.: El documental tiene dos funciones: crear un testamento vivo de las personas que han vivido en la comarca de Sanabria, en especial de las mujeres, para que esos pueblos no queden en el olvido y, por otro lado, darle voz al papel de la mujer desde mediados de siglo en la familia y en la sociedad sanabresa, porque es un papel que ha estado ninguneado y ha llegado la hora de darle el sitio que merece.

Jose B.: Hemos utilizado una narrativa diferente formada por seis historias intercaladas y contadas por temática. Ver esas mujeres en pantalla, cómo se ríen, etc. crea un nivel altísimo de empatía con el espectador. Al final, el vídeo queda ahí como memoria e historia y este va a ser la historia y la memoria de todas estas personas.

¿Qué es lo que más os ha llamado la atención de la vida de esas mujeres creando este documental?

Jose B.: Las historias, el ver cómo era la vida de antes, en la que no tenían absolutamente nada y sin embargo, había mujeres que solas sacaban adelante familias de hasta 10 hijos, sin luz, cocinando y remendando prendas a la luz de las velas, por ponerte un ejemplo. En la actualidad tienen mejores medios pero les falta gente y más servicios. Por ejemplo, hay mujeres enfermas que lo tienen verdaderamente difícil para acceder a un tratamiento o una consulta. Han trabajado muchísimo y muy duro y, ahora que podrían disfrutar de su vejez, no pueden descansar porque no tienen gente en sus pueblos, no tienen nada ni nadie que les ayude.

Nacho R.: La solución es uno de los temas que se tratan en el documental porque al final es un problema de toda la sociedad, y sobre todo en Castilla. ¿Qué va a pasar con los pueblos de aquí a 20 años? Lamentablemente, no tenemos la piedra filosofal en ese aspecto pero se platean una seria de posibilidades desde su punto de vista. Yo creo que cada pueblo tiene su encanto particular que debe potenciar y no existe una única formula para salvarlos. Es trabajo depende de los habitantes, que cada vez son menos y menos interesados en los pueblos, y las instituciones que los rigen que son las que deben buscar una solución urgente.

Jose B.: En esas zonas hay montaña, río y muchísimas posibilidades para fomentar un turismo rural brutal. Estos pueblos no tienen nada que envidiar a las cercanías del Lago, que es lo que la gente conoce. No se sale de Puebla y su lago pero todos los pueblos de alrededor tienen un potencial brutal para generar turismo de casas rurales, campamentos, actividades de bici, de senderismo y un larguísimo etcétera.

Nacho R.: El boom turístico que se le da al entorno del lago no llega a estos pueblos de la Baja Sanabria y por eso se les ha relegado. Este documental es una manera de decir que también son Sanabria, que no se les olvide y que tienen mucho que ofrecer.

El título del documental es 'Argaña, un nombre especial con un precioso significado.

Nacho R.: Existe un diccionario de vocablos sanabreses e, intentando buscar una palabra que pudiera identificar lo que queremos transmitir con el docmuental, decidimos escoger "argaña" porque es el grano del trigo, la parte que está dentro de la espiga y no se ve. Es un símil con lo que son estos pueblos para Sanabria, son invisibles por lo que decíamos antes, porque cuando hablas de Sanabria no los tienes en mente aunque pertenezcan a la comarca. Así intentamos que la cultural sanabresa esté presente en todo el ámbito del documental.

Como jóvenes que trabajás en Zamora, ¿qué os ha enseñado este documental?

Jose B.: En nuestro trabajo no dejamos de aprender porque conoces muchísimas historias y aprendes constantemente. En este trabajo, nos hemos dado cuenta de lo que mucho que llegamos tener y que la sociedad quiere más y más. El último móvil, una casa más grande... cuando esa gente nacía, vivía y moría en el pueblo, no salían de allí, no les hacía falta, y probablemente fueran muchísimo más felices de lo que somos nosotros ahora. Yo me quedo con eso.

Nacho R.: Lo que más nos impactaba a la hora de hacer las entrevistas a estas mujeres era que recordaban esos tiempos de una Sanabria medieval en siglo XX, sin luz, ni servicios mínimo, con frío y unas condiciones terribles, como tiempos duros pero con una sonrisa y, aunque reconocen que era una salvajada y que eran muy esclavas porque se levantaban a las seis de la mañana para arar, cuidar animales, hacer la comida... aún así, eran felices. Y esa sonrisa no les quitaba contando todo eso porque eran felices con poco. Ahora eso es imponible de concebir

¿Qué planes de presente y futuro tiene Konsak Producciones?

Jose B.: Después de trabajar en 'Un País Mágico' para TVE y a parte de este documental, estamos produciendo CyL Suena y está funcionando muy bien en la televisión autonómica (los sábados por la tarde). La verdad es que el tener ahora la oportunidad de ser los dueños de nuestro propio proyecto es algo especial y la experiencia más bonita que he vivido trabajando. Tenemos en mente otro documental e intentaremos luchar por más programas en televisión y pequeños proyectos propios que no por ser más pequeños son menos importantes.

Nacho R.: Intentaremos que el documental llegue a la mayor gente posible y emitirlo o estrenarlo en Zamora. Y luchar por festivales de documentales e incluso televisión nacional. Aprovechamos la oportunidad para agradecer la colaboración y el empuje de José Chimeno, presidente de la asociación El Medero. Hace falta más gente como él que, además de querer cultura en Zamora, luche por ella con ganas y garras.