La Operación Sonrisa permitirá llevar juguetes a 186 niños de las familias más vulnerables de Zamora
Gracias a la Operación Sonrisa los niños y niñas de las familias más vulnerables de la ciudad podrán recibir también sus regalos que les permitan vivir la magia de la Navidad y disfrutar en igualdad a ilusión de los Reyes Magos, independientemente de la situación económica por la que puedan atravesar sus familias.
Desde la Concejalía de Servicios Sociales se han repartido un total de 186 vales de 25 euros entre las 126 familias cuya situación económica y social es más delicada, de acuerdo con los datos que manejan los Centros de Acción Social en las distintas zonas de la ciudad. La campaña se coordina también con Cruz Roja y Cáritas, con el fin de evitar duplicidades y que ninguna familia que realmente lo necesite se quede sin poder comprar juguetes para sus hijos.
Los vales se entregan a los padres con hijos menores de 10 años y en esta ocasión se han repartido 43 vales más que el pasado año, en el que se entregaron 143, debido al incremento de familias en situación de precariedad a causa de la pandemia del coronavirus, rompiendo la evolución de los últimos años en que se había reducido paulatinamente las familias necesitadas con niños menores.
La Operación Sonrisa en un programa social puesto en marcha por el Ayuntamiento en el año 1995 con el propósito de fomentar la igualdad entre las familias y que ningún niño o niña de la ciudad se quedara sin juguetes en la noche de Reyes, independientemente de su situación económica. A diferencia de los inicios en que se entregaban juguetes reciclados, en los últimos años se reparten vales para que sean los propios padres los que acudan a las jugueterías colaboradoras y adquieran los juguetes que deseen para sus hijos, escogiendo dentro de sus posibilidades económicas y pudiendo sumar también otros regalos que ellos mismos adquieran.
Para la concejala de Servicios Sociales, Inmaculada Lucas, se trata de atender lo que se puede considerar también como una necesidad básica "ya que el juego es un derecho de todos los niños, porque es tan importante para su desarrollo social y emocional como una buena alimentación o ir a la escuela".