La fachada del edificio consistorial se iluminará esta noche de color morado con motivo del Día Internacional del Síndrome de Dravet, que se celebra el 23 de junio. El síndrome de Dravet es una enfermedad rara, una epilepsia que no tiene cura y que no responde a ningún tratamiento actual, llamada a veces como epilepsia catastrófica de la infancia. Aparece en bebés sanos durante el primer año de vida y provoca crisis epilépticas sin control, retraso cognitivo, problemas de movilidad y retraso en el lenguaje, además de un 15 por cierto de mortalidad.
El Ayuntamiento de Zamora se suma así a la conmemoración del Día Internacional del Síndrome de Dravet, con el propósito de dar la mayor visibilidad posible a esta enfermedad rara con el objetivo de alertar y concienciar a la sociedad de todos los retos y dificultades que tienen en su día a día, así como de la necesidad de invertir más en investigación para paliar los efectos de esta enfermedad y mejorar la calidad de vida de los que la sufren.