Más de 1.100 personas asistieron hoy en el recinto ferial de , en la capital zamorana, al acto de entrega de los XXIII Premios de la Fundación Caja Rural de Zamora, en el que fue reconocido con el Premio ‘Zamorano del año’; el Teléfono de la Esperanza, con el Premio ‘Valores humanos’; la Banda de Gaitas ‘As ’, con el Premio ‘Cultura’; la investigadora Manuela Juárez, con el Premio ‘Zamorana ilustre’; el bodeguero Manuel Fariña, con el Premio ‘Mundo Rural – Trayectoria’, y el tirador David Sotelo, con el Premio ‘Deporte’, tal y como informa .
“La Fundación Caja Rural de Zamora ha estado siempre al lado de infinidad de proyectos e ilusiones de colectivos y personas que dinamizan y nutren de un caudal de vida la sociedad a la que pertenecemos. Los valores y principios de la Caja son los pilares que se extienden, también a su fundación, y que reflejan el sentido de pertenencia y solidaridad”, aseguró el presidente de Caja Rural de Zamora, Nicanor Santos, durante su intervención.
“Vuestro apoyo es nuestro compromiso y, gracias a esa lealtad, podemos revertirla, todos los años, a través de cientos de colaboraciones. Este es el sentido cooperativo y de ayuda mutua que precede siempre a la acción de Caja Rural de Zamora”, recalcó.
es reconocido en esta edición con el Premio ‘Zamorano del año’ como “colaborador indispensable para la coordinación de los colectivos” que aglutina, con especial relevancia durante la pandemia. “Es un galardón para los más de 34.000 profesionales que, durante este período de pandemia, han estado y están al frente de la vigilancia y cuidado del valor más importante: la vida de todos nosotros. A todos, desde el corazón, nuestra más sincera enhorabuena”, dijo.
En cuanto al Premio ‘Deporte’, David Sotelo es valorado por conseguir, “con solo 18 años y tres de duro entrenamiento y competición, alzarse con el Campeonato de Europa de Tiro al Plato y ser subcampeón del mundo Trap 5”. El Premio ‘Cultura’, le corresponde a la Banda de Gaitas As , de Lubián, “paraíso de la Alta Sanabria y La Carballeda. Más de quince años divulgando la cultura y las tradiciones , con más de cien alumnos, premio al reconocimiento cultural”, anotó.
Por lo que se refiere al Premio ‘Mundo Rural - Trayectoria’, fue concedido a Manuel Fariña por ser “una de las referencias más sólidas” del mundo vitivinícola, con un trabajo reconocido internacionalmente y el hecho de haber sido uno de los principales impulsores de la creación y puesta en marcha de la Vino de Toro. “Manuel, tu esfuerzo y trabajo incansable en pro de los vinos de Zamora, de la Toro y de la promoción de Zamora en todos sus aspectos, te avalan para reconocerte, con esa sonrisa, siempre en tu semblante, como el embajador, por excelencia, de los vinos de nuestra tierra”, afirmó el presidente de la cooperativa de crédito.
El premio ‘Valores humanos’ recayó sobre el Teléfono de la Esperanza, que “tiene el objetivo principal de dar vida, ilusión y esperanza” a quienes requieren apoyo en momentos muy delicados de su salud mental, con un estado emocional en crisis, siempre mostrando un trato afable y de consuelo en aquellas personas que lo están pasado muy mal, según valoró la Fundación. “Cincuenta años de ayuda y colaboración resumen perfectamente la labor del Teléfono de la Esperanza, su preocupación y desvelo por atender a muchas personas, a muchos de los nuestros: aportándoles vida, ilusión y sosiego, son el mejor de los avales de una extraordinaria trayectoria”, subrayó Nicanor Santos.
En cuanto al Premio ‘Zamorana ilustre’, concedido a la investigadora Manuela Juárez, el presidente de Caja Rural de Zamora hizo hincapié en la “eficiente vida dedicada a la investigación y al estudio” en temas de alimentación. “Vinculada, principalmente, al sector lácteo, la prestigiosa química fue incluida en 2018 en la Tabla Periódica de las Científicas. Su recorrido, su esfuerzo y sus contribuciones merecen el mayor de los galardones”, apuntó.
Por último, Nicanor Santos hizo hincapié en que, “para crear y crecer solo hay el camino de la unidad y el compromiso”, y concluyó: “El compromiso que hace que Caja Rural siga apoyando e impulsando económica y socialmente los territorios donde opera, comprometida con las familias y las ilusiones de esta tierra y, en particular, con Zamora, que sueña y respira por su recuperación”.