El Ayuntamiento de Benavente anuncia un aumento en la vigilancia policial y las labores de recogida de los excrementos animales en la ciudad. Así lo ha explicado el concejal de Medioambiente, Manuel Burón, tras haber recibido "reiteradas disconformidades", y un aumento de las quejas y solicitudes de vecinos relativas a la retirada y limpieza de excrementos caninos por toda la ciudad, en calles, aceras, parques y jardines y demás zonas verdes del municipio.

Así que, asegura que, desde su Concejalía se procurarán "las medidas oportunas para que tanto el personal municipal de limpieza vial como el de jardines incrementen las labores de recogida de las mismas, tratando de minimizar las consecuencias de este problema".

Burón recuerda que esta situación "es constante y se viene manteniendo en los últimos años", pese a tener en vigor la Ordenanza Municipal sobre Animales de Compañía en vigor desde julio de 2000.

Durante los pasados ejercicios 2019, 2020, 2021 y lo que ha transcurrido de 2022, "apenas se ha tramitado alguna denuncia relacionada con el incumplimiento de la obligación de recogida de los excrementos de animales de compañía en la vía pública, acción tipificada como infracción leve en la citada Ordenanza municipal", indica el concejal.

Pero, la Concejalía de Medioambiente ha requerido a la de Seguridad Ciudadana para que recabe un informe de la Policía Local sobre las acciones llevadas a cabo durante los años anteriormente citados para hacer cumplir la Ordenanza Municipal sobre Animales de Compañía, detallando aquellas relativas a la obligación de la ciudadanía de recoger los excrementos de animales de compañía de las vías públicas así como las sanciones impuestas al respecto.

El concejal de Medioambiente recuerda que se han puesto en marcha campañas cívicas de concienciación dirigidas a los dueños de los perros, para que actúen de manera responsable recogiendo las deposiciones de sus animales. "Incluso se han elaborado y distribuido en varias ocasiones centenares de portabolsas con bolsas para la recogida de excrementos caninos entre la población de nuestro municipio", detalla en un comunicado.

Aun así, Burón lamenta que por "muchas medidas que se tomen para limpiar y recoger los excrementos y para concienciar a los propietarios de los perros, la labor de vigilancia y control de los espacios públicos de nuestra ciudad no es suficiente".



Desde la Concejalía consideran "imprescindible" que se vele por el cumplimiento de las ordenanzas municipales, que se detecten aquellos comportamientos incívicos y que se sancionen convenientemente, "puesto que es la única manera de hacer valer los principios de convivencia ciudadana que se persiguen desde las campañas de sensibilización".

Por ello, la Concejalía de Medioambiente solicita que se incrementen las labores de vigilancia por parte de la Policía Local para detectar incumplimientos de las ordenanzas municipales en todo lo relativo a los excrementos caninos, de la misma manera que se vienen incrementando los esfuerzos de esta Concejalía por garantizar la limpieza de los espacios comunes.