La diseñadora zamorana Ainhoa Salcedo ha presentado sus vestidos de novia con bordados carbajalinos en la Pasarela de la Moda de Castilla y León. Una propuesta que ha aunado diseños "muy románticos y sexys" con las típicas decoraciones del traje regional de Carbajales de Alba, el pueblo natal de su abuela, Arbolina, quien, además da nombre a su colección.

En declaraciones recogidas por la Agencia Ical, Ainhoa Salcedo ha explicado que se trata de una colección "muy femenina", en la que ha decidido combinar las transparencias y los escotes amplios con las lentejuelas y las flores bordadas de la tradición zamorana. 

Unos bordados que son toda una obra de arte y reliquia tradicional de la zona, por ello, el propio Museo del Bordado Carbajalino de la localidad ha prestado tres piezas completas a la diseñadora para poder adornar sus vestidos de novia. También detalló que el nombre de su abuela es "muy típico y exclusivo" de su pueblo natal, y que corresponde a la Virgen de Árboles. Aprovechando esta tesitura, Ainhoa Salcedo ha querido poner en valor las zonas rurales como estas, que "están un poco despobladas, pero tienen un montón de talento". 

Los abrigos de la realeza 'made in Zamora'

En la segunda jornada de la Pasarela de la Moda de Castilla y León también ha aparecido otra presencia zamorana. Nada menos que la empresa familiar Marae, muy popular porque sus modelos infantiles son habitualmente elegidos por la princesa de Gales, Kate Middleton para vestir a sus pequeños vástagos. 

En esta ocasión, la firma zamorana presentó un conjunto de diseños dirigidos a la mujer urbana, con diseños casuales y de calidad. Sus responsables explicaron que esta colección es para la temporada de otoño-invierno 2022, con abrigos en los que se ha apostado mucho por el tartán, con colores "más innovadores", como el amarillo o el rojo, mezclándolo con colores para que destaquen. Según indicaba su diseñadora, Manoli Escudero, sus diseños son para una mujer "muy urbanita, con prendas muy cómodas".

Marae es una empresa familiar con 43 años de historia, formada por los hermanos Escudero, Raúl y Manoli, donde se fabrica artesanalmente con lana merina procedente de Austria. Los zamoranos elaboran sus propios tejidos con lana cocida y la cortan una por una a mano con tejiera, la cosen con cuidado, buscando el resultado lo más perfecto posible y, una vez terminadas, controlan las prendas "cuidadosamente" para detectar fallos.

Sobre la situación actual, Raúl Escudero admitía que los tiempos "vienen muy malos", explicando que ante una crisis "la gente recorta gastos primero en ropa". Si bien, se muestra positivo, en un sector acostumbrado a pasar por este tipo de malos momentos. El zamorano está convencido en seguir apostando por "ropa de calidad", y aprovechar "los perores momentos, para dar con oportunidades".