La Fundación Franz Weber ha pedido a las administraciones que prohíban la presencia de menores en las cacerías, tras el fallecimiento de un cazador de 26 años en el municipio zamorano de Fermoselle, tras un disparo accidental durante una caída.
En un comunicado, la Fundación explica que desde los 14 años se puede obtener licencia de armas y que la Ley de Caza no determina “medidas adicionales” para las cacerías, por lo que los menores están expuestos a los posibles peligros de las batidas.
Asimismo, critica el “lobby procaza, que intenta que menores sigan una práctica que implica el uso de armas, de fuego o de filo, como los cuchillos para rematar a jabalíes, y situaciones de evidente inseguridad que afectan tanto a su integridad física como moral”. Ante estas situaciones, la Fundación Franz Weber pide a las administraciones prohibir la participación de menores de edad en estas actividades.