Las investigaciones de los agentes medioambientales y personal técnico han revelado que una colilla mal apagada fue la causa del incendio forestal originado ayer, 29 de agosto, entre Fornillos de Aliste y Fonfría.

El fuego se originó en la cuneta derecha de la N-122, en dirección a Zamora, específicamente en el punto kilométrico 505. A causa de las condiciones climáticas adversas (temperaturas altas) y la vegetación seca, las llamas se propagaron rápidamente, calcinando un total de 2,23 hectáreas de vegetación arbustiva en un monte de utilidad pública.

La respuesta ante la emergencia fue rápida y coordinada. Un operativo compuesto por cinco agentes medioambientales, dos helicópteros, dos cuadrillas helitransportadas, dos autobombas, una cuadrilla terrestre, el equipo UBA de brigada y autobomba, y una máquina buldózer, fue desplegado para controlar el incendio. Gracias a su esfuerzo conjunto, lograron contener las llamas y limitar el área afectada.

La Junta de Castilla y León actuó declarando el nivel 2 de gravedad a las 14.21 horas. La densidad del humo inicialmente obstaculizó la circulación vehicular en la carretera nacional N-122, lo que llevó al cierre del tráfico en la zona. Para hacer frente a esta situación, se implementó el Plan de Protección Civil ante Emergencias por Incendios Forestales, facilitando la llegada eficiente de los equipos de combate contra incendios y evitando una propagación mayor de las llamas.

Una vez que el incendio fue estabilizado, la Guardia Civil se encargó de garantizar la seguridad en la carretera afectada, permitiendo la circulación segura de vehículos. En este punto, al no representar peligro para la población, a las 15.01 horas se redujo el nivel del incendio a nivel 0. Finalmente, a las 16.45 horas, se consideró el incendio estabilizado y controlado, habiendo asegurado el perímetro irregular y organizado labores de vigilancia nocturna con cuadrillas y autobombas en el área afectada.

Los resultados de la investigación realizada por los agentes medioambientales y técnicos de la Consejería de Medioambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio han confirmado que la causa del incendio fue una colilla arrojada imprudentemente a la cuneta. La Guardia Civil está trabajando para identificar al responsable, quien podría enfrentar consecuencias económicas y legales por su negligencia.

Colilla que dio origen al incendio de Fonfría

Y es que la sanción por arrojar colillas u objetos inflamables desde un vehículo a la vía o sus alrededores es de 500 euros, además de la retirada de 6 puntos del carnet de conducir. Con la reforma de la Ley de Tráfico, esta infracción pasó de ser considerada grave a muy grave, lo que resultó en un aumento de los puntos a retirar, pasando de 4 a 6 puntos.

Este incidente subraya la importancia de la responsabilidad durante los periodos de alto riesgo de incendios forestales. Además, se suma al reciente incendio en Robledo, ambos desencadenados por acciones humanas. La Junta de Castilla y León recuerda a la población que está prohibido arrojar fósforos, colillas u otros materiales inflamables en zonas de monte y terrenos rústicos durante todo el año.