El senador por la provincia de Zamora, Fernando Martínez-Maillo Toribio, pregunta en el Senado al Gobierno de España por el estado de las obras de conservación de la carretera N-631 que comunica Montamarta y Mombuey, una de las principales vías de comunicación entre la capital zamorana y el noroeste provincial.
Cabe destacar que estas obras provocaron, durante una buena parte de los meses de julio y agosto, que los conductores tuviesen que desviarse varios kilómetros para poder desplazarse desde Zamora capital hasta la parte noroccidental de la provincia, lo que suscitó un gran número de críticas por la gran demora que suponía este trayecto, así como por la época del año en la que acometieron las obras.
Por ello, el senador también quiere saber si el Ministerio tiene previsto indemnizar a las empresas y a los ciudadanos de la zona por los daños ocasionados por las obras ejecutadas en pleno verano por responsabilidad patrimonial de la administración, algo que él considera que sí debe hacerse y que pide, en cierto modo.
Del mismo modo, Martínez-Maillo pide explicaciones al Gobierno Socialista sobre las razones por las que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana decidió acometer dichas obras en pleno periodo estival, a sabiendas de los daños que estas ocasionarían a las empresas y ciudadanos de las zonas afectadas de la provincia en el periodo de más actividad económica del año y en aquel en el que se produce un gran número de desplazamientos.
Si bien es cierto que esta primera fase de la obra, la cual ha afectado a algo más de 15 kilómetros de la N-631, ya está prácticamente finalizada, de tal manera que, tal y como dieron a conocer el subdelegado de gobierno, Ángel Blanco, y los responsables de la Unidad de Carreteras del Ministerio de Transportes hace varios días, las obras van a continuar hasta Tábara en octubre y noviembre, siempre y cuando el tiempo lo permita.
Además, aseguraron que estas se pararán en agosto del año que viene para así evitar más inconvenientes a los ciudadanos. En las nuevas fases de la obra se procurará dar paso alternativo al tráfico, de modo que solo habría problemas de cierre completo en el tramo final de la carretera, es decir, entre el cruce con la carretera autonómica de Alcañices y la intersección con la N525.