Años hace que el acceso a los aparcamientos de la estación de tren de Zamora no tienen ningún tipo de control. La empresa SABA, hasta ahora responsable del servicio, mantenía abierta la valla de acceso a los mismos, lo cual ha provocado que el parking aparezca frecuentemente lleno por vehículos que no están haciendo uso de las infraestructuras ferroviarias.
Algo que podría llegar a su fin ya que Adif y Adif Alta Velocidad han comenzado el proceso de licitación para el arrendamiento de espacios destinados a la actividad de aparcamiento en un total de 55 estaciones de viajeros, que suman un total de 22.000 plazas. Esta iniciativa abarca 23 instalaciones de Adif y 32 de Adif Alta Velocidad, incorporando seis nuevas estaciones: Zamora, Cáceres, Plasencia, Figueres, Huelva y Virgen del Rocío (Sevilla). Además, se contempla la posibilidad de incorporar aparcamientos en proyecto o construcción durante el período de vigencia del contrato.
El contrato, con una duración de diez años prorrogables por cinco años adicionales, tiene un valor estimado de 246,3 millones de euros. La estructura del arrendamiento ha sido diseñada para satisfacer las demandas de los usuarios y los desafíos tecnológicos, asegurando una actuación continua en este ámbito.
El adjudicatario, que se encargará de la gestión, cobro y control, así como del mantenimiento y la limpieza de los espacios, elementos e instalaciones de los aparcamientos, deberá realizar un plan de inversión por un monto mínimo de 36,3 millones de euros, con la mitad de esa cantidad desembolsada en los primeros 18 meses del contrato.
El contrato establece una estructura de rentas que implica la participación de Adif y Adif Alta Velocidad en los resultados del negocio, garantizando un equilibrio en el reparto de ingresos entre el arrendador y el arrendatario. La renta fija que abonará el adjudicatario es de 42,3 millones de euros, con una cantidad adicional de 21,2 millones de euros en caso de prórroga.
Además, la empresa explotadora del servicio abonará una renta variable, equivalente a un mínimo del 25% de sus ingresos en el primer año, aumentando en un punto porcentual cada año del contrato.
En cualquier caso, el arrendatario deberá abonar a Adif y Adif Alta Velocidad un importe mínimo garantizado cada año de contrato, alcanzando los 106,5 millones de euros en los diez años de vigencia. En caso de prórroga, la renta mínima garantizada para ese período ascenderá a 76,2 millones de euros.