El youtuber zamorano Daniel Alonso (Yo Soy Plex) llegaba anoche al plató de El Hormiguero por primera vez. Y allí pudo recordar sus inicios en la plataforma con un vídeo de él mismo cuando apenas era un niño y que grabó desde su habitación en Toro. Un momento muy entrañable para el joven que compartió con Pablo Motos sus inicios en YouTube.

Este joven toresano de 22 años suma la friolera de 12,8 millones de suscriptores en YouTube. Pero antes de eso, Daniel era un adolescente que, incluso bajo otro seudónimo, ansiaba con conseguir 100.000 seguidores. Muy joven y desde su casa en Toro, el joven ya sumaba 2.600 seguidores y se grababa un vídeo advirdiendo de que "lo voy a conseguir". 

"Me acuerdo de ese momento, estaba estudiando y me daba cuenta de que yo no queria hacer eso, me estaba desahogando y convenciéndome a mí mismo de que podía llegar a algo así", explicaba el joven en El Hormiguero. Y vaya si lo hizo. 

Daniel comenzó con "tutoriales de vídeojuegos y luego hice vídeos con mi hermana, sobre todo durante la pandemia, hasta que a los 17 años me mudé a Madrid con mis amigos". Con ellos hacía vídeos de broma y luego vino el salto a los viajes, donde ha alcanzado ya una fama mundial. 

Plex ha recorrido en dos ocasiones el mundo, en 80 y en 85 días, registrando todas sus peripecias en vídeo para sus millones de seguidores. Cuando Pablo Motos le ha preguntado cuál cree que es la clave de su éxito, el toresano no sabe concretar, pero cree que sus seguidores empatizan con él porque "mostramos los problemas cotidianos" y piensa que "lo que más le gusta a la gente es la naturalidad, yo soy la misma persona ahora que luego en el camerino".

"Hay que intentarlo"

Durante su entrevista, Daniel también ha dejado un consejo para sus seguidores. Él ha alcanzado la fama mundial y desde el primer momento tenía claro que así sería, así que anima a los jóvenes que deseen dedicarse a la creación de contenido en redes que lo intenten.

"Hay que intentarlo, porque el próximo puedes ser tú", apuntaba en El Hormiguero. Plex ha señalado la importancia de continuar estudiando y formándose, pero no quiere "matar el sueño de nadie". Está convencido de que "hay personas que mañana pueden ser como yo y solo se vive una vez".