La noticia de la detención del presidente del Zamora CF, Víctor de Aldama, el pasado miércoles 21 de febrero ha caído como un jarro de agua fría en el seno rojiblanco. El que fuera su salvador económico en 2018 estaba siendo investigado por presunta pertenencia a una organización ilegal se benefició de contratos sanitarios durante la pandemia del COVID para la compra de mascarillas, con Koldo García, mano derecha del exministro José Luis Ábalos como principal cabecilla.

Una detención y posterior puesta en libertad con cargos, tras negarse a declarar, que ha congelado las cuentas de todas las empresas de Víctor de Aldama, incluyendo al Zamora CF. Cabe recordar que desde hace más de cinco años la viabilidad económica del club zamorano dependía casi en exclusiva de su presidente. 

Fueron los socios de número quienes en una Junta Extraordinaria en junio de 2018 decidieron que el Zamora CF se transformara en Sociedad Anónima Deportiva, con el Grupo Vivir como socio mayoritario. Una solución para evitar precisamente su desaparición por una deuda de 200.000 euros que ahogaba al club.

Esto significó que el Zamora CF dejaría de tener socios que pagaran su cuota y solo podría tener abonados, que junto a la venta de entradas, merchandising y patrocinadores sustentarían económicamente el club junto a Víctor de Aldama y Alfredo Ruiz. 

Precisamente aquel año de la reconversión en S. A. D., Víctor de Aldama consiguió como patrocinadores casi principales del club al estado mexicano de Oaxaca y la bodega Cavall 7, también de México. Sponsors que sorprendieron en la época y que ahora están estrechamente unidos a la trama criminal que rodea a Aldama y Koldo García. 

Víctor de Aldama y Alfredo Ruiz presentan a Oaxaca y Cavall 7 como patrocinadores del Zamora CF en 2018 Zamora CF

Cabe recordar que Aldama participó en un viaje oficial a México con Ábalos, Koldo García y Carmen Librero, presidenta de INECO en 2019; y donde se reunieron con un representante del senado mexicano y el embajador español en el país, Juan López Dóriga.

En todo momento, Aldama fue presentado por el senado mexicano como cónsul honorario de España en Oaxaca. Un puesto que oficialmente le consta a Manuel Alonso Serrano. Pero el propio Ábalos ha reconocido que coincidió con Aldama en este viaje porque tenía relaciones "con México y las autoridades mexicanas". 

A la izquierda, Ábalos, un miembro de su equipo (delante), su asesor Koldo García y el presidente del Zamora, Víctor de Aldama Delgado, en un viaje a México junto al ministro al que acudió como supuesto cónsul honorario de España en Oaxaca en 2019. E.E.

Así, el estadio Ruta de la Plata, las equipaciones y hasta el traje del entrenador, David Movilla, se llenaron con los logotipos de estos dos capitales mexicanos. Pero tal y como vino, el dinero de estos dos inversores mexicanos desapareció coincidiendo con el descenso del Zamora CF de nuevo a Segunda División RFEF (división de la antigua Segunda B) en la temporada 2021-2022. 

De su bolsillo

Con el paso de los años, Aldama tomó por el control por completo del club y se convirtió en el máximo benefactor de la entidad rojiblanca; mientras que su socio Alfredo Ruiz se quedó a un lado. De hecho, en la actualidad se desconoce con claridad cuál es la participación total de Aldama en el accionariado del club, pero se estima que sería más del 80%. 

Así que cuando afloraron las primeras informaciones sobre deudas acumuladas con jugadores y empleados de la entidad, fue el propio presidente del Zamora CF quien solventó la crisis con dinero de su bolsillo, tras un problema de impago con dos patrocinadores.

Una situación económica que poco a poco se fue controlando hasta el verano de 2023. En el mes de agosto, la noticia del embargo de las cuentas del Zamora CF por parte de Hacienda volvía a salir a la palestra. Según los datos aportados por entonces, la Agencia Tributaria exigía el pago de 100.000 euros al club rojiblanco, bajo la gestión de Aldama. 

Este respondía con "un mensaje de tranquilidad" para jugadores, trabajadores, proveedores y socios del club, aunque admitía que la situación económica del Zamora CF era "más complicada" con la retirada de patrocinios tras el descenso de categoría. Además, se quejaba del "nulo apoyo económico" recibido por parte de las instituciones, "a diferencia de lo que sucede con el resto de clubes de la ciudad y provincia", sentenciaba.

Víctor de Aldama atendiendo a los medios de comunicación

También fue el propio Aldama quien hizo frente a otra deuda con Hacienda, de 81.500 euros, por la cual las cuentas del Zamora CF ya quedaron embargadas. Por todos estos problemas, el propio empresario presumía de sus aportaciones personales a la viabilidad económica del club, quien aseguraba que había ingresado, una vez más, de su propio bolsillo, 918.915,95 euros desde el inicio de esta temporada.

Meses más tarde, en diciembre de 2023, el Zamora CF anunciaba finalmente había conseguido abonar todos los pagos pendientes con Hacienda, 120.000 euros; y otros 430.000 euros a Seguridad Social, atrasados de la temporada anterior; y que las cuentas del club rojiblanco habían quedado saneadas. Y a finales de enero, solo unas semanas antes de la 'Operación Delorme', el club confirmaba que se encontraba al día de pago con todos sus empleados.

Hermetismo e incertidumbre

Tras el escándalo que ha salpicado a su presidente, el Zamora CF ha cerrado filas y se remiten al comunicado oficial emitido el pasado 21 de febrero. En él, aseguraban que la actividad ordinaria de la entidad "seguirá adelante, prestando todos los servicios que requieran nuestros abonados y aficionados por parte del amplio equipo humano que conforma el club". 

EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León ha contactado con el abogado del club, David Ángel Hernández, quien remite a ese comunicado oficial y asegura que "se desconoce cualquier dato al respecto" de lo que vaya a ocurrir en un futuro próximo con el Zamora CF. 

Por el momento, solo confirma que los 50 trabajadores, entre jugadores, equipo técnico y empleados varios del estadio, la Escuela de Fútbol y la Oficina del Socio, están al corriente del pago de sus nóminas. Pero no puede aclarar qué va a ocurrir cuando finalice el mes de febrero si las cuentas de la entidad siguen congeladas por la investigación. 

Como se ha recalcado, el equipo tenía como máxima (y casi única) fuente de ingresos a Víctor de Aldama, que había ido 'tapando los agujeros' del club con su dinero. Y a diferencia de sus otras empresas también intervenidas pero que sí generan sus propios beneficios, el Zamora CF se encuentra en una situación tremendamente delicada.

Aficionados del Zamora CF Zamora CF

El equipo cuenta con apenas 2.000 abonados, la venta de entradas y de bebidas en el estadio, cinco patrocinadores principales (Caja Rural de Zamora, Diputación Provincial, Ibika, San Gregorio y Autobuses Tamame), apoyo institucional del Ayuntamiento de Zamora y la Junta de Castilla y Léon y una treintena de colaboradores con empresas zamoranas, según su web oficial.

De estos dependen ahora mismo medio centenar de nóminas, gastos en desplazamientos del equipo, mantenimiento del estadio y la oficina en Santa Clara y devenires propios de un club deportivo. Algo que, vistas las crisis económicas anteriormente solventadas siempre por el propio capital del Aldama, se antoja complicado con las cuentas congeladas y su accionista mayoritario en libertad con cargos por ser el supuesto comisionista del caso Koldo.

Solo queda esperar que el Juzgado de Instrucción Número 2 de la Audiencia Nacional decida si nombra una gestora de los bienes y empresas de Víctor de Aldama, que pueda permitir al Zamora CF acceder a sus cuentas e intentar sobrevivir, de momento.