San Sebastián de los Reyes. Será un lugar que los aficionados zamoranos no olvidarán jamás. En esa localidad madrileña, el Zamora CF ha logrado hoy el ascenso a la Primera RFEF, tras vencer por la mínima al CD Sanse.

Los zamoranos tenían las peores cartas para jugar la partida, ya que solamente les servía un resultado. Los hombres dirigidos por Movilla estaban obligados a ganar, mientras que al cuadro local le valía incluso el empate.

Pero la partida hay que jugarla hasta el último momento, y los zamoranos tiraron de casta, orgullo, talento y todo lo que tenían, para lograr lo que parecía, en principio, imposible, porque jugarse un ascenso fuera de casa ya te hace salir con algo de desventaja desde el pitido inicial.

Eso sí, aquello no pareció Matapiñonera, sino el feudo zamorano, puesto que, tras el sufrimiento del choque, los cánticos rojiblancos de los más de 1.200 aficionados que se acercaron a tierras madrileñas, se escuchaban dentro y fuera del campo. El artífice final de esta gesta fue Luis Rivas, quien, a falta de algo más de media hora para cerrarse el partido, fusilaba al portero local para poner el 0-1 en el marcador.

Desde ahí y hasta el final, nervios, muchos nervios en las filas zamoranas, quienes resoplaron a diez minutos para el pitido cuando el esférico se topó con el travesaño, mientras que Fermín Sobrón daba oxígeno a los suyos salvando un balón bajo el marco.

El marcador no se movería y el Zamora CF cumplía el sueño de ascender a la Primera RFEF.