El delegado territorial de la Junta en Zamora, Fernando Prada, ha confirmado que el incendio ocurrido el pasado fin de semana en las localidades de Trabazos y Sejas de Aliste fue provocado de manera intencionada. Según Prada, no solo se buscaba iniciar el fuego, sino que se pretendía causar "muchísimo daño", en un acto que ha calificado como "terrorismo medioambiental". Y ha indicado que existe una investigación en curso por parte de la Policía Judicial "para intentar ver qué persona o personas cometieron este acto delictivo".

Prada ha recordado que el fuego comenzó el sábado alrededor de las 17 horas, cuando se detectó la primera columna de humo en una zona boscosa con una alta concentración de pinos, lo que facilitó la rápida propagación de las llamas. Además, las condiciones de viento en ese momento contribuyeron a que el incendio se extendiera rápidamente, obligando a las autoridades a tomar medidas drásticas.

Debido a la gravedad de la situación, se procedió a cortar la carretera nacional N-122 y la carretera comarcal CL-2343, y a evacuar la localidad de Sejas alrededor de las nueve de la noche. Por ello, Prada agradeció el trabajo de los servicios de extinción de la Junta de Castilla y León, que no solo incluyeron a efectivos de Zamora, sino también de Salamanca y Valladolid. El delegado territorial ha recalcado que fue gracias a su rápida y efectiva intervención, se logró evitar que el fuego alcanzara una gasolinera cercana, lo que habría podido agravar aún más la situación.

El delegado territorial también expresó su reconocimiento a la Cruz Roja, a la población de Alcañices, y a todos los que colaboraron en el desalojo, destacando la facilidad con la que se llevó a cabo la evacuación, a pesar de la proximidad de las llamas a las viviendas de Sejas.

Prada lamentó que, como consecuencia indirecta del incendio, una persona falleció durante la evacuación, un vecino de Sejas de 65 años, y un miembro de las cuadrillas de extinción de Salamanca sufrió un accidente leve, aunque se encuentra en buen estado. Por ello, ha recalcado que estos actos no solo ponen en riesgo la vida de los servicios de emergencia, sino que también dañan a la población y al medioambiente, con la pérdida de aproximadamente el 75% de la masa arbórea de la zona afectada.

Finalmente, el delegado territorial ha querido hacer un llamamiento a la sociedad para evitar este tipo de acciones delictivas y aseguró que la policía judicial continuará con la investigación para identificar a los responsables. Prada ha subrayado que no se trata solo de un ataque contra la Junta de Castilla y León, sino contra toda la sociedad, que sufre las consecuencias de la destrucción del patrimonio natural.