En el marco de los contactos con el sector agrícola, pesquero y alimentario, Su Majestad el Rey ha mantenido hoy una videoconferencia con representantes del sector ovino y caprino, quienes le han informado de las consecuencias de COVID-19, con una alarmante caída del mercado, descenso de precios y demanda, que hacen muy difícil su continuidad.

En la videoconferencia han participado el presidente del Consorcio de Promoción del Ovino, Benjamín Fernández Anta; el director gerente del mismo consorcio, José Antonio Asensio Carreras; el presidente de Oviaragón-Grupo Pastores, Francisco Santolaria; y el su director general, Ángel Tarancón.

El sector ovino y caprino representa en España el 12% de la Producción Final Ganadera, si se tiene en cuenta el conjunto del subsector cárnico y el lácteo. Con un censo ovino que en los últimos cinco años se encuentra estabilizado alrededor de los 16 millones de cabezas, España es el país en importancia de la Unión Europea tras el Reino Unido. Igualmente, y tras el censo de Grecia, España es el segundo país comunitario en censo de ganado caprino con unos 3 millones de animales. (Datos 2016).

Debido al carácter extensivo de una parte importante del sector y a que es una actividad que se asocia a aquellas zonas donde no existen otras alternativas económicas, este sector tiene un papel primordial en la vertebración del territorio, en la conservación del entorno y en la generación de empleo en zonas rurales. Ahora, a pesar de la epidemia, los ganaderos han continuado en su quehacer diario de atención a sus ganaderías y las cooperativas han continuado prestando servicio y asesoría a todos sus socios para garantizar la recogida de leche, la recogida de carne y el suministro de piensos.

En la conversación con don Felipe, los representantes de este sector han explicado que se han visto especialmente afectados por el rápido deterioro del mercado de la carne de ovino y caprino, dado que su producción es marcadamente estacional, siendo precisamente esta la temporada de producción, y vinculada a su consumo en restaurantes y hostelería, canal que ha tenido que cerrar por las medidas decretadas en el estado de Alarma. Esto ha generado un gran excedente y ha tenido como consecuencia directa un alarmante descenso en los precios pagados al ganadero. El consumo de carne de cordero en el hogar, según datos del MAPA, ha estado descendiendo una media de un 20% cada semana desde que comenzó esta situación.

Por otra parte, el sector caprino de leche denuncia un ajuste abusivo de la demanda, con una bajada de precios por debajo de costes, por lo que llama a la responsabilidad del resto de actores de la cadena a que apuesten por el sector productor nacional. Este compromiso debe traducirse en la recogida de toda la leche que se produce en España, el estricto cumplimiento de la normativa y la puesta en valor del producto de proximidad.

Ante esta situación, el Gobierno está tramitando con carácter de urgencia un real decreto que recoge ayudas directas destinadas a los ganaderos de ovino y caprino. Sin embargo, el Consejo Sectorial de Ovino y Caprino teme que un presupuesto insuficiente para las ayudas ponga en peligro la viabilidad de este sector ganadero. También demanda otras medidas que podrían suponer un importante alivio de la situación, algunas de las cuales competen a la Comisión Europea.

Respecto a la comercialización de leche de oveja, la cooperativa está en contacto permanente y trabajando con Clientes, Proveedores, Unión Regional de Cooperativas, Consejería de Agricultura y Ganadería, y responsables del MAPAMA para garantizar la recogida de leche y cumpliendo con el estricto cumplimiento de la normativa y la puesta en valor del producto. Del mercado nacional cabe destacar que las pequeñas y medianas industrias queseras han descendido sus necesidades de leche de oveja en un 70%.

Cuantitativamente, el efecto de la crisis sobre el precio del litro de leche 2020 percibido por el ganadero podría alcanzar los 0.05 euros el litro (lo que puede ser su margen neto) de la leche producida durante los meses de marzo, abril y mayo (33% del total producido durante el año). Por ello, consideran vital que la Ley de la Cadena de Valor garantice que el precio de la leche de oveja percibido por el ganadero cubra sus costes de producción.

En cuanto a la comercialización de carne de ovino, los representantes han explicado que la referida al lechazo ha vivido momentos muy complicados durante las tres semanas previas a Semana Santa. Tuvo un repunte de ventas a lo largo del periodo de Semana Santa y parece que han dado resultado las campañas de promoción y las campañas de sensibilización para consumir este producto en los hogares, así como la venta directa a través de internet.

En la conversación ha estado presente también la esquila, porque el consorcio ha solicitado autorización para que los profesionales de la esquila que se contratan todos los años traigan 300 esquiladores de Uruguay, en una operación que ya llevan realizando una década, pero que ahora está afectada por las restricciones impuestas por la epidemia.

El Consorcio de Promoción del Ovino es una sociedad cooperativa dedicada a la producción de leche de oveja y carne de ovino (lechazos y corderos) en el medio rural. Agrupa los intereses empresariales de 700 socios ganaderos y de sus 650 ganaderías, presentes en 11 provincias y en Castilla y León, Castilla la Mancha y Navarra. Estos son territorios donde el consumo del cordero y del lechazo constituyen hechos nutricionales y culturales de enorme relevancia.

Oviaragón-Grupo Pastores es el resultado de 39 años de trabajo y creencia en el cooperativismo desde que 25 ganaderos fundaron la primigenia Carnea Aragón, que tras varios procesos de fusión formaron Oviaragón-Grupo Pastores en el año 2000, creando una gran cooperativa de ovino con 700 socios aragoneses y de provincias limítrofes y con un volumen de 500.000 ovejas, criadas en 400 pueblos y que pastorean 1.000.000 de hectáreas de cultivos y bosques.

Se ha consolidado como la cooperativa líder en la evolución del sector ovino en Europa comprometida a ofrecer a sus clientes una carne de alta calidad con la máxima seguridad alimentaria. Produce anualmente 5.000.000 de kilos de carne de cordero en diferentes formatos y calidades en el mercado nacional e internacional, y exporta a más de veinte países de Europa, Oriente Medio y Asia. Tienen un alto compromiso con la sociedad, con la conservación del medio natural y con la sostenibilidad de las zonas rurales, manteniendo población y ofreciendo una salida laboral para muchos jóvenes.