El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha rechazado entrar en la polémica entre el vicepresidente de la Junta de Castilla y Leon, Francisco Igea, y el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, tras las medidas impuestas por el Gobierno regional a esta ciudad.
Mañueco ha defendido la labor de Igea y la consejera de Sanidad, Verónica Casado, a asegurando que “han sido la punta de lanza en la lucha contra la pandemia. Su trabajo ha salvado muchas vidas”.
Por ello, el presidente de la Junta ha pedido a los ayuntamientos “la misma colaboración que ofrecemos al Gobierno de España”. Mañueco ha reconocido que como regidor que ha sido, “entiendo que cada alcalde debe tomar sus propias decisiones pensando en lo mejor para los vecinos”.
Mañueco sí que ha apuntado que al Ayuntamiento de Valladolid se le trasladó hace más de dos semanas de la preocupación por la evolución epidemiológica y sanitaria y ha descartado que las restricciones impuestas tengan que ver con “agravios territoriales o colores políticos”. “Son las mismas medidas para Valladolid y Salamanca, con alcaldes de colores distintos”, ha puntualizado.
Desde la Junta de Castilla y León, ha señalado, se ha puesto en una balanza la vida y la seguridad de las personas de Valladolid, así como otras cuestiones como la cultura, celebraciones y encuentros. Tras el respaldo a la Junta de las dos resoluciones que ratifican las medidas, Mañueco ha valorado el “esfuerzo por defender la vida, la salud y seguridad de las personas”.