Castilla y León registra el primer verano en cuatro años sin fallecimientos atribuibles al calor
Castilla y León no ha registrado fallecimiento alguno atribuible al calor durante el verano de 2020, algo que no se había producido en los últimos cuatro años, según el Informe del sistema de Vigilancia de la Mortalidad por procesos relacionados con temperaturas elevadas (VIMTE).
Así, el informe no recoge muertes por esta causa, cuando el pasado verano se registraron cinco y en el de 2018 uno y el año anterior se produjeron tres durante el periodo estival, cuando está activo el VIMTE (entre el 1 de junio y el 15 de septiembre).
Según el informe de la Consejería de Sanidad recogido por Europa Press, en Castilla y León las temperaturas medias este verano han sido superiores a las normales (cálido) o muy superiores a lo normal (muy cálido), si bien en zonas del norte y, sobre todo, del noreste ha llegado a tener un carácter normal.
El estío comenzó con un mes de junio con un carácter, normal o frío en la mayor parte de la Comunidad, con algunas zonas del norte en las que el balance fue de muy frío mientras que, de manera más localizada, en áreas del centro y del sur llegó a ser ligeramente cálido.
El mes de julio fue muy cálido o extremadamente cálido en la mayor parte de Castilla y León y únicamente en zonas del noreste su carácter ha sido cálido. De hecho, este mes registro la temperatura media más alta desde 1951 en los observatorios de la Comunidad.
El mes de agosto fue predominantemente cálido, presentado una anomalía positiva en torno a 0,3 grados respecto a su promedio en Castilla y León, si bien en algunas zonas, sobre todo en el noroeste y en el suroeste tuvo un carácter normal.
La temperatura media en la primera quincena de septiembre se situó un grado por encima del valor normal, siendo la anomalía positiva de las temperaturas máximas muy superior a la de las temperaturas mínimas.
OLAS DE CALOR
Los episodios más destacados del verano fueron lo que puede considerarse dos olas de calor muy seguidas. La primera entre el 25 y el 30 de julio y la segunda entre el 6 y el 10 de agosto. En ambos episodios se registraron las temperaturas máximas del verano destacando los valores observados en el Valle del Tiétar (Ávila), que superaron los 40 grados.
En cuanto a los episodios fríos el más largo se situó entre el 7 y el 13 de junio, con heladas débiles y la temperatura mínima más baja, dos grados bajo cero registrada en Vegarienza (León) el 8 de junio. El período de frío más intenso, pero de menor duración, sucedió entre el 28 y el 31 de agosto.
Durante el periodo comprendido entre el 1 de junio y el 15 de septiembre el Plan Nacional ha comunicado un total de 317 niveles de riesgo en las Comarcas de Castilla y León.
Cuatro de cada cinco alertas notificadas han sido de Nivel 1, el 18,3 por ciento de Nivel 2 y destacan cinco alertas de Nivel 3 en los días 28 de julio, 6 y 7 de agosto. Los periodos con mayor número de alertas se produjeron entre los días 26 al 30 de julio y 3 al 7 de agosto (15 ó más Comarcas en alerta cada día).
El nivel 3 o de alto riesgo se produce cuando se espera que en los siguientes cinco días las temperaturas máximas y mínimas previstas superen simultáneamente los valores umbrales de referencia respectivos.
Este nivel ha sido activado en cinco ocasiones, dos en la dona de la Ibérica de Soria (los días 28 de julio y 6 de agosto), otras tantas en la Meseta de Palencia (los días 6 y 7 de agosto) y una vez el día 6 de agosto en la zona de Zamora.
OTROS AVISOS
El nivel 2 o de riesgo medio se produce cuando se espera que en los siguientes tres o cuatro días las temperaturas máximas y mínimas previstas superen simultáneamente los valores umbrales de referencia respectivos y fue activado en 58 ocasiones, 28 en el mes de julio y 30 en agosto. Destacó por su frecuencia la comarca de Zamora (doce días), Bierzo de León (siete días), Meseta de Palencia e Ibérica de Soria (seis días en cada una) y Meseta de Valladolid (cinco días).
Julio fue el mes en que más niveles de alerta se activaron (172 Niveles; 54,3 por ciento del total). Destaca la activación del Nivel 3 en 1 ocasión y del Nivel 2 en 28 ocasiones. El periodo del mes de julio con más niveles de alerta fue el comprendido entre los días 26 y 30 de junio (más de 10 alertas) y las provincias en que con más frecuencia se activó algún nivel de alerta fueron Zamora, León, Soria, Palencia y Valladolid (15 ó más en cada una).
En agosto se activaron 124 niveles de alerta (39,1 por ciento del total) y destaca la activación de cuatro alertas de Nivel 3 entre los días 6 y 7 de agosto. El periodo con mayor número de alertas se produjo entre los días 3 al 9 (con diez o más comarcas en alerta cada día). Sin embargo, no se comunicó ninguna alerta en el periodo del 11 al 31 de agosto (excepto una de Nivel 1 el día 27 en Zamora).
Las provincias en las que con más frecuencia se activó algún nivel de alerta fueron Salamanca y Zamora (más de diez días en cada una).
En el mes de junio se comunicaron 19 niveles de riesgo (6 por ciento) en las Comarcas de Castilla y León, todos de nivel 1 o bajo riesgo, entre los días 19 y 24.
Durante la primera quincena del mes de septiembre sólo se activaron en la comarcas de Castilla y León dos Niveles 1 durante los días 9 y 11, señala el informe.