Piden dos años de cárcel para dos hombres por agredir y retener a un empresario de Íscar por una deuda
La Audiencia de Valladolid sienta en el banquillo el próximo día 23 de marzo a dos empresarios castellanomanchegos por, presuntamente, agredir y retener a un industrial de Íscar para que éste les entregara una máquina que le habían comprado y que tardaba en llegarles.
La vista oral del juicio se celebrará en la Sección Cuarta de lo Penal de la Audiencia Provincial, a la que el fiscal del caso acude con una petición de dos años y medio de cárcel para los hermanos Simón y Miguel Ángel V.R. por un delito de detención ilegal, así como una multa de 600 euros por otro delito leve de lesiones, junto con la obligación de indemnizar a su víctima, de forma conjunta y solidaria, en la cantidad de 250 euros, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.
En el juicio se analizarán hechos ocurridos en junio de 2019 cuando los dos acusados, propietarios de una empresa con sede en Toledo, conocieron a la víctima, R.M.M, gerente de una empresa de maquinaria de carpintería, durante la celebración de una feria del ramo en Valencia y ya entonces le encargaron dos máquinas cargadoras por las que de adelantaron el pago de 23.000 euros.
Dado que la maquinaria tardaba en llegarles, ambos acusados optaron el día 11 de junio de 2019 por desplazarse desde Toledo a Íscar para que al encargado de entregársela cumpliera lo pactado o, en caso contrario, les devolviera el dinero que habían anticipado por transferencia bancaria.
Así, llegados a Íscar sobre las 08.40 horas del referido día, los dos encausados se entrevistaron con R.M.M. en la calle Cardales, le agredieron repetidamente propinándole puñetazos en el rostro y todo el cuerpo y, una vez caído al suelo, siguieron pegándole patadas, siempre según el relato de hechos realizado por la acusación pública.
Una vez más calmados, los presuntos agresores introdujeron a la fuerza al agredido en su vehículo y se dirigieron por la carretera CL-602 hasta la localidad segoviana de Cuéllar, trayecto en el que llamaron por teléfono con el sistema de manos libres a una empresa de Valencia que debía dinero al retenido por unos trabajos realizados a fin de que dicha mercantil le pagara y así ellos pudieran cobrarse la deuda también.
Fue a raíz de las llamadas efectuadas a la Guardia Civil por parte de vecinos que habían presenciado la introducción a la fuerza de la víctima en el vehículo cuando se activó un dispositivo que concluyó con su localización, sobre las 10.00 horas, a la altura del kilómetro 9j7,500 de la mencionada vía, a la altura del término de Mata de Cuéllar (Segovia).
El identificar a los ocupantes, los agentes comprobaron que el vecino de Íscar presentaba heridas y sangre en la nariz y en los labios, sin que pudiera dar una explicación del motivo de ocupar el turismo, mientras que uno de los procesados, Miguel Ángel, tenía heridas en los nudillos de ambas manos y su hermano restos de sangre en la camisa, de ahí que los guardias civiles procedieron a la detención de estos últimos.