Hubo un tiempo en el que el Grand Prix del Verano, el programa del abuelo y del niño, como decía el estribillo de su pegadiza sintonía, se convirtió en el momento televisivo más visto del verano. En sus inicios, allá por 1995 tuvo audiencias de hasta un 36% de share, una cifra que en estos tiempos solo lograría Eurovisión o un partido de la selección de fútbol. Y es que la generación Grand Prix del Verano marca una época.

Ahora, 18 años después, Televisión Española ha decidido desempolvar del baúl de los recuerdos este programa y lo hace con importantes novedades, pero con la misma esencia: que los pueblos de España demuestran su talento. Eso sí, lo tendrán que hacer sin vaquilla porque la ley del bienestar animal puesta en marcha por el Gobierno de PSOE y Podemos lo evita. Seguirá habiendo las míticas pruebas como las de los aguadores o la de bolos, pero no habrá vaquilla, o por lo menos física, porque si habrá una virtual. Y por supuesto todo esto liderado por Ramón García, ya que de otra forma no tendría sentido.

Esta semana se han conocido los pueblos que estarán presentes en esta edición de 2023 y serán ocho, y entre ellos uno de Castilla y León, Aguilar de Campoo (Palencia) que intentará traerse la que sería la cuarta victoria para un municipio de la Comunidad, ya que en el palmarés del concurso hay tres pueblos que se han hecho con el entorchado: Guijuelo en 1996, Carrión de los Condes en 2005 y Renedo de Esgueva en 2009. Todos ellos superaron varias pruebas físicas e intelectuales, algunas de ellas llevadas a cabo dentro de un pequeño coso taurino en el que se soltaba la famosa vaquilla.

[Este es el pueblo que representará a Castilla y León en el regreso del Grand Prix del Verano]

Todos ellos tienen un grato recuerdo, cientos de anécdotas y la satisfacción de haber sido reconocidos como el mejor pueblo del verano, y por supuesto, una gran promoción turística. El ESPAÑOL Noticias de Castilla y León recuerda cómo fueron sus participaciones, aunque fueron temporadas diferentes todos afirman que salir en un programa así y encima ganar supone “una gran promoción” para el pueblo.

Guijuelo y su frase más repetida

La segunda edición del Grand Prix del Verano fue para Guijuelo. El pueblo salmantino era conocido por sus jamones, pero a partir de 1996 también lo fue por la calidad y la cultura de sus vecinos. En la gran final se impuso a Sabiñánigo (Huesca) con Los del Río como padrinos. Además del reconocimiento de todo el país, los salmantinos se llevaron los 6 millones de pesetas (36.060,73 euros) del primer premio y sobe todo el cariño del pueblo que no pararon de cantar una canción: “¡Chorizo! ¡Jamón! ¡Guijuelo, campeón!”.

Carrión de los Condes en pantalla gigante

En 2005, y con un padrino dando el cante como David Bustamante, el pueblo palentino de Carrión de los Condes se proclamó campeón del programa más visto del verano. Lo hizo tras ganar en la final a Ribera Alta (Álava) por 32 a 26 puntos. 40.000 euros fue el premio que se llevaron los palentinos. El alcalde de esa época ya señaló que la participación en el Grand Prix era una forma importante de promocionar esta ciudad en todo el país y que lo importante era participar con deportividad. El Ayuntamiento tiró la casa por la ventana e incluso puso dos pantallas gigantes en la plaza Mayor para que el público pudiera seguir la emisión. Y eso que el resultado ya se sabía. Unos días que en el pueblo siempre recuerdan con ilusión y alegría.

Renedo, ganador con susto

El último ganador del Grand Prix fue en 2009 la localidad vallisoletana de Renedo de Esgueva. Eso sí, no lo hizo ante TVE, lo hizo cuando FORTA (Federación de Organismos de Radio y Televisión Autonómicos) recuperó la emisión del programa. Por desgracia las audiencias no fueron las mismas y así acabó desapareciendo. Sin embargo desde Renedo recuerdan con mucho cariño su paso por el concurso del verano y con 30.000 euros más en las arcas municipales, que era el precio de esa época. Eso sí, no fue fácil, por ejemplo, uno de los concursantes renedienses sufrió una cogida de la vaquilla y tuvo que ser llevado a un hospital de Madrid. Todo quedó en un susto.

En la primera fase, Renedo de Esgueva fue apadrinado por Fernando Romay, un clásico de este programa, mientras que en la final amadrinados por Carolina Cerezuela, se enfrentaron a El Viso del Alcor (Sevilla), al que vencieron sin problemas. Desde Renedo recuerdan los autobuses que se pusieron en marcha para ir a la capital, aunque lo mejor fue la fiesta que tuvieron al llegar a Renedo donde fueron recibidos al grito de campeones, campeones.