La Red Europea de Lucha Contra la Pobreza y la Exclusión Social en Castilla y León (EAPN CYL) presenta cada año el Informe ‘El Estado de la Pobreza y la Exclusión Social en Castilla y León’, un termómetro que sirve para que posteriormente organismos y entidades sociales puedan hacer una radiografía de lo que está pasando en nuestros hogares. Un informe que ha sido presentado en el Salón de Actos de la sede del Consejo Económico y Social de Castilla y León (CESCYL) con la presencia de Enrique Cabero Morán, presidente del CESCYL y Óscar Castro Vega, presidente de EAPN CYL y que Jonathan Sánchez, coordinador de EAPN CYL y Cristina Sánchez, técnica de incidencia, han sido los encargados de exponer los principales resultados del informe.
Un informe que dice que Castilla y León es la novena comunidad con menor tasa de riesgo de pobreza en España. La Comunidad se encuentra en la mitad de un ranking que divide a España en pobre hacia el sur y rica hacia el norte. Así, el informe dice el 22,1% de la población en Castilla y León estaría en situación de pobreza o exclusión social, cerca de 523.805, el 17,8% (421.400 personas) en situación de pobreza económica de renta, el 5% de privación de material social (112.798 personas) y el 7,2% en situación de pobreza severa (170.830 personas), todo ello según la tasa Arope. Todos los indicadores han bajado, algo que podría llamar al optimismo, salvo porque hay uno que ha subido, que es la pobreza severa. Pasando del 3,8 a un preocupante 7,2.
Jonathan Sánchez, coordinador de EAPN CYL, señala cuál es el perfil de la pobreza en Castilla y León: mujer, joven, con hijos a cargo y en el entorno rural. Y es que las mujeres vuelven a ser las peores paradas de este informe, y eso que los números han mejorado. “Las condiciones de las mujeres han mejorado, pero no acaba de romper con esa brecha. Una brecha que está presente en todas las variables y que se ha acortado pero no es suficiente”, apunta.
Eso sí, puede que los datos sean peores para el año que viene ya no está reflejada la gran inflación que estamos viviendo en 2023, ya que los datos que se recogen son del 2022 y con declaraciones de la renta de 2021. Sánchez apunta a que la pandemia “hundió” una evolución que estaba cumpliendo con lo previsto, ahora “nos vamos recuperando poco a poco”.