El incendio forestal en San Esteban del Valle, en la provincia de Ávila, es el único fuego activo en estos momentos en Castilla y León, según el parte del Servicio de Medioambiente de la Junta de Castilla y León. Un incendio en el que, según estas mismas fuentes, están trabajando un coordinador de medios aéreos, tres agentes medioambientales, un helicóptero, dos cuadrillas helitransportadas, un buldócer, cuatro autobombas y nueve cuadrillas de tierra.
Multitud de medios forestales que, desde el pasado 7 de julio se afanan en su extinción. Horas y horas de trabajo en el que los bomberos forestales trabajan a destajo para que el fuego no siga devorando terreno. Pues bien, entre estas cuadrillas ha surgido una crítica respecto al trato y cuidado por su bienestar de la Junta de Castilla y León. Ayer mismo, uno de estos bomberos forestales se quejaba a través de sus redes sociales del avituallamiento que los Servicios de Medioambiente les facilitaban, para poderse reponer después de la dura jornada de trabajo.
En un tweet explicaba que, tras siete horas de trabajo, la Junta de Castilla y León les había facilitado apenas un pequeño bocadillo "con pan de ayer, y "cinco litros de agua para siete tíos". Una situación que llevababa a este bombero a calificar a los responsables de la Junta, y en concreto al presidente, Alfonso Fernández Mañueco como "repugnantes".
Un mensaje a través de Twitter que ha recibido multitud de comentarios de apoyo, afeando el trato que la Junta da a sus bomberos forestales.