La consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, ha señalado que en los análisis iniciales de los test de detección rápida del coronavirus que el Ministerio de Sanidad ha remitido a Castilla y León se advierte un "buen nivel" por lo que podrían ser "muy aceptables" para su extensión.
"Da la sensación de que pueden tener un buen nivel de especificidad", ha asegurado, tras lo que ha aclarado que por el momento el Gobierno ha enviado pocos ejemplares de estos test, ya que Castilla y León espera una remesa de unos 50.000. "Una vez que los recibamos los vamos a distribuir", ha explicado.
No obstante, ha señalado que al determinar que el Hospital Río Hortega de Valladolid sea centro de referencia en pruebas de detección molecular agilizará las pruebas normales y habrá un "repunte" de los casos diagnosticados.
Por otra parte, Casado ha agradecido al alcalde de Medina del Campo (Valladolid), Guzmán Gómez, su disposición para trasladar a la Junta el contacto del laboratorio con el que trabajaba para adquirir estos test rápidos, ya que, como ha explicado la consejera, a día de hoy comprar estas pruebas es "bastante más fácil" dada la extensión del virus a países como Suiza.
"El consejero de la Presidencia se puso en contacto con el alcalde de Medina y la actitud fue estupenda lo puso a nuestra disposición", ha explicado, tras lo que ha rechazado ceder a especuladores ya que el test en el mercado se sitúa a un precio de unos 10 euros en otros mercados puede alcanzar los 15.