Disfarduero, una de las principales empresas de distribución de productos farmacéuticos y de ortopedia de Castilla y León, prevé que vuelva a haber test de antígenos en las farmacias a partir del próximo 29 de diciembre.
Al incremento desmesurado de la demanda de estos productos en el último mes (un 500% más que durante octubre y noviembre), se le suma los problemas de transporte en los principales mercados.
Se prevé que estos test de detección rápida de covid lleguen por avión a España alrededor del 27 de diciembre y que, tras pasar las correspondientes aduanas farmacéuticas, lleguen a los establecimientos sanitarios de Castilla y León.
Todos los test de antígenos provienen de China, mientras que los de anticuerpos proceden de proveeedores europeos. Cuando estos productos llegan por vía marítima, el plazo de entrega desde que se efectúa la compra es de cerca de cuatro semanas, por lo que las previsiones para su adquisición y venta al público son complicadas.
Sin embargo, el precio de hacer estos pedidos por avión se multiplica por cuatro, por lo que la mayor parte de los distribuidores eligen su transporte por barco.
Ayer el escenario era el mismo en toda España, no sólo en Castilla y León. Farmacias en todo el territorio español colgando el cartel de 'no hay test de antígenos' para evitar inútiles largas colas de quienes pretendían hacerse con uno de estos test de cara a las próximas reuniones familiares.
De hecho, y ante la subida del precio de estos productos, con diferencias entre territorios de hasta un 200% derivadas del fuerte incremento en su demanda y de una oferta insuficiente, el Consejo General de Enfermería ha pedido al gobierno la intervención del mercado para regular estas oscilaciones como ya se hizo con las mascarillas.