Si algo nos ha enseñado el Covid es que, pese a ser bastante repudiado por los más urbanitas, el entorno rural ofrece un gran número de ventajas de las que carecen las grandes ciudades. La paz, la tranquilidad y el aire fresco que se puede respirar en el campo, donde también se pueden divisar paisajes absolutamente excepcionales, son algunas de las cosas que más hemos empezado a valorar a raíz del confinamiento.
Todo esto ha llevado a que cada vez sean más las parejas que eligen el entorno rural como escenario para celebrar el día más importante de sus vidas: su boda. Y es que, la mayoría de ellas suelen decantarse por las fincas, pues son los lugares que más de moda están en lo que a las bodas en el campo se refiere. Tanto es así, que en los últimos años el sector ha experimentado un surgimiento de infinidad de fincas para bodas en el entorno natural, quizá por la sencilla razón de que estas ofrecen a todos aquellos que planean pasar por el altar un amplio abanico de posibilidades para hacer que su boda se convierta en un sueño cumplido.
Entre las principales ventajas con las que cuentan estos lugares destinados a la celebración de bodas en el campo se encuentran la de poder crear un ambiente íntimo y privado con todos los invitados al no tener la necesidad de compartir el espacio y al poder personalizar la experiencia según los gustos, deseos y preferencias de los protagonistas; la de poder organizar toda la boda en un mismo enclave combinando los espacios al aire libre con los cerrados; la de disfrutar de un menú basado en la gastronomía local; y la de aprovechar la belleza natural para crear el mejor álbum de la boda, entre otras.
Castilla y León alberga un sinfín de fincas para bodas. Desde EL ESPAÑOL - Noticias de Castilla y León te proponemos 10 que harán que el día de tu boda sea insuperable.
Finca La Leyenda (Valladolid)
Con más de 10 años de experiencia en el sector, este caserío reformado y ubicado en el municipio de Mucientes ofrece a todos sus clientes un servicio integral de alta calidad permitiéndoles, además, organizar una boda personalizada y hecha a la medida de los protagonistas. Aseguran que la calidad y la preocupación por los detalles son la seña de identidad de la finca, lo que, según apuntan desde la organización, permite conseguir un excelente grado de satisfacción.
Caserío Brazuelas (Valladolid)
Se trata de un espacio inspirado en la toscana italiana que se sitúa en un paraje idílico y con mucho encanto de Alcazarén. Al igual que la anterior, esta finca cuenta con espacios exteriores e interiores muy bien preparados para albergar todo tipo de bodas. Además, dispone de alojamiento tanto para los novios como para un total de 16 invitados.
Los Claustros de Ayllón (Segovia)
Un lugar único con mucha historia que alberga las ruinas de un antiguo monasterio franciscano con más de 800 años de antigüedad, comúnmente conocido como el antiguo convento de San Francisco. Tras su restauración, se ha convertido en un lugar perfecto para celebrar una boda de ensueño gracias al paraje natural en el que se integra, a sus amplios jardines y a su estanque natural, entre otros espacios.
Finca El Montecillo (Ávila)
65 hectáreas de terreno en Peñalba de Ávila adaptadas a la celebración de eventos exclusivos y formadas por "un rico ecosistema de pinos, encinas y vegetación de rivera en torno al río Adaja". Quienes lo han visitado aseguran que se trata de un espacio excepcional para que todos aquellos amantes de la naturaleza pasen por el altar, destacando instalaciones como la carpa, el merendero y las zonas ajardinadas que conforman la finca.
Hacienda Zorita (Salamanca)
A tan solo 10 minutos de la ciudad de Salamanca se encuentra la Hacienda Zorita, un complejo equipado con todo lujo de detalles. Cuenta con hotel, spa, bodega y también con amplios espacios para la celebración de eventos privados de gran envergadura como es el caso de una boda.
El convento de Mave (Palencia)
Hablamos de un antiguo monasterio del siglo XII reformado y convertido en un hotel, con una pequeña capilla acostumbrada a oficiar ceremonias, así como con un selecto restaurante en el que se han celebrado infinidad de banquetes nupciales, y con mucho éxito.
El Cigarral de Cembranos (León)
San Cibrián alberga esta preciosa construcción rodeada de jardines y decorados naturales, capaces de aportar un extra de magia y exclusividad a cualquier boda. Se encuentra a solo 12 kilómetros de León y sus instalaciones también permiten la celebración de ceremonias civiles.
Finca Maradela (Zamora)
Esta villa de más 10.000 metros cuadrados se encuentra en pleno monte de San Miguel de Grox y en ella se dice que tuvo lugar la famosa batalla de Toro que logró asegurar el trono de Castilla a Isabel y Fernando. Hoy está acondicionada para la celebración de eventos marcados por la exclusividad, los detalles, la excelencia, y cómo no, la calidad de su entorno, el cual contribuye a que siga siendo considerado un destino incomparable.
Finca Torremilanos – Burgos
La Finca Torremilanos, ubicada en Aranda de Duero, en plena Ribera del Duero, la conforman sus viñedos, su excepcional bodega, un restaurante de calidad y un hotel basado en el confort más auténtico, es decir, todo lo necesario para hacer de una boda un recuerdo inolvidable para todos sus asistentes.
Casa Fuerte San Gregorio - Soria
Esta maravillosa finca de Almarza es otro de los emplazamientos castellano y leoneses en los que se puede celebrar una boda de ensueño. Y todo gracias a su jardín, ideal para grandes celebraciones y eventos al aire libre; a sus diferentes espacios de interior y exterior con capacidad para hasta 300 personas; a las dos casas rurales situadas en el mismo complejo para todo aquel que desee quedarse a dormir; y al inmenso aparcamiento de 200 plazas con el los invitados no se verán agobiados por no saber dónde dejar su vehículo.