La vacuna contra el coronavirus que desarrolla la universidad británica de Oxford parece "segura" y "entrena" el sistema inmunológico, según revelan los hallazgos de las primeras fases del estudio, divulgados este lunes.



Durante los ensayos clínicos realizados por expertos del prestigioso centro académico, 1.077 voluntarios mostraron que una inyección les llevaba a producir anticuerpos y células blancas de la sangre que pueden combatir el virus.

En el estudio, publicado este lunes en la revista científica The Lancetla vacuna provocó una respuesta de las células T en los 14 días siguientes a la vacunación (glóbulos blancos que pueden atacar a las células infectadas con el virus del SARS-CoV-2), y una respuesta de los anticuerpos en los 28 días siguientes (los anticuerpos son capaces de neutralizar el virus para que no pueda infectar a las células cuando se contraiga inicialmente).

Durante el estudio, los participantes que recibieron la vacuna tenían anticuerpos neutralizantes detectables, que han sido sugeridos por los investigadores como importantes para la protección, y estas respuestas fueron más fuertes después de una dosis de refuerzo, con el cien por cien de la sangre de los participantes teniendo actividad neutralizante contra el coronavirus. El siguiente paso en el estudio de la vacuna es confirmar que puede proteger eficazmente contra la infección del SARS-CoV-2.

Sin reacciones inesperadas

Estos descubrimientos se consideran "muy prometedores", si bien todavía es necesario llevar a cabo ensayos a mayor escala a fin de determinar si los anticuerpos son suficientes para ofrecer protección a largo plazo contra la enfermedad. 

"Los datos de la fase I/II de nuestra vacuna contra el coronavirus muestran que la vacuna no provocó ninguna reacción inesperada y tuvo un perfil de seguridad similar al de las vacunas anteriores de este tipo. Las respuestas inmunológicas observadas después de la vacunación están en línea con lo que los estudios anteriores en animales han demostrado que están asociadas con la protección contra el virus del SARS-CoV-2, aunque debemos continuar con nuestro riguroso programa de ensayos clínicos para confirmarlo en los seres humanos", explica Andrew Pollard, investigador jefe del Ensayo de Vacunas de Oxford en la Universidad de Oxford y coautor del estudio.

Los investigadores observaron una respuesta inmunológica más fuerte en los 10 participantes que recibieron dos dosis de la vacuna, lo que indica que esta podría ser una buena estrategia para la vacunación. Los investigadores dijeron que la vacuna causó efectos secundarios menores con mayor frecuencia que un grupo de control, pero algunos de estos podrían reducirse tomando paracetamol, sin eventos adversos graves de la vacuna.

La Universidad de Oxford está trabajando con la empresa biofarmacéutica AstraZeneca en el desarrollo ulterior, la fabricación a gran escala y la posible distribución de la vacuna COVID-19, y los planes para el desarrollo clínico y la producción de la vacuna de Oxford avanzan a nivel mundial. El proyecto se ha visto impulsado por una financiación gubernamental de 84 millones de libras para ayudar a acelerar el desarrollo de la vacuna.

Noticias relacionadas