Wu Ping, subdirectora del programa de vuelos espaciales tripulados, declaró en rueda de prensa lo que mucha gente llevaba meses temiendo. La estación espacial china Tiangong-1 está fuera de control y se estrellará contra la Tierra a finales de 2017.
Actualmente, la Tiangong-1, lanzada en 2011 como el primer intento del país asiático de tener una estación espacial propia, orbita a una altura de 370 kilómetros.
"Sobre la base de nuestros cálculos y análisis, la mayor parte del laboratorio espacial se quemará durante la caída", dijo Wu Ping durante la rueda de prensa. Esta alta funcionaria del gobierno añadió que la agencia espacial china continuará siguiendo el movimiento del Tiangong-1, y lanzará una actualización de su hora prevista de llegada a la Tierra.
El Tiangong-1, que significa literalmente "palacio celestial", mide 10,3 metros de largo y precedió al lanzamiento hace unos días del Tiangong-2, el nuevo intento chino de estación espacial experimental que prevé finalizar en 2020 con la construcción de un análogo chino a la ISS.
Sin embargo, tras terminar su misión en marzo de este año, algunos astrónomos alertaron de que la nave parecía orbitar a la deriva y en dirección a la Tierra. El silencio y la opacidad gubernamental contribuyeron a aumentar esta incertidumbre, ahora despejada.