La tribu que descubrió Colón no se extinguió: sus descendientes siguen viviendo
Los habitantes de islas del Caribe como Puerto Rico están emparentados genéticamente con los taínos, que no fueron erradicados sino asimilados.
20 febrero, 2018 10:37Noticias relacionadas
Un diente de mil años ha proporcionado evidencia genética de que los llamados "taínos", los primeros indígenas americanos en sentir el impacto total de la colonización europea después de la llegada de Cristóbal Colón al Nuevo Mundo, todavía tienen descendientes vivos en el Caribe en la actualidad.
Los investigadores pudieron usar el diente de una mujer encontrada en una cueva en la isla de Eleuthera en las Bahamas para secuenciar el primer genoma humano completo del Caribe. La mujer vivió en algún momento entre los siglos VIII y X, al menos 500 años antes de que Colón tocara tierra en las Bahamas.
Los resultados proporcionan información sin precedentes sobre la composición genética de los taínos, una etiqueta comúnmente utilizada para describir a los indígenas de esa región. Esto incluye la primera evidencia clara de que ha habido un cierto grado de continuidad entre los pueblos indígenas del Caribe y las comunidades contemporáneas que viven en la región en la actualidad.
Se había sugerido un vínculo así previamente por otros estudios basados en ADN moderno, pero ninguno de ellos fue capaz de recurrir a un genoma antiguo. La nueva investigación finalmente proporciona pruebas concretas de que la ascendencia indígena en la región ha sobrevivido hasta la actualidad.
Comparando el antiguo genoma de las Bahamas con el de los puertorriqueños contemporáneos, los investigadores descubrieron que estaban más estrechamente relacionados con el antiguo taíno que cualquier otro grupo indígena en las Américas. Sin embargo, argumentan que es poco probable que esta característica sea exclusiva de los puertorriqueños y están convencidos de que los estudios futuros revelarán legados genéticos similares en otras comunidades del Caribe.
Es probable que los hallazgos sean especialmente significativos para las personas en el Caribe y en otros lugares que han reclamado durante mucho tiempo el patrimonio indígena taíno, a pesar de algunas narraciones históricas incorrectamente los califican de "extintos". Estas tergiversaciones han sido fuertemente criticadas por historiadores y arqueólogos, así como por las mismas comunidades descendientes, pero hasta ahora carecían de evidencia genética clara para apoyar su caso.
El estudio fue realizado por un equipo internacional de investigadores dirigido por el doctor Hannes Schroeder y el profesor Eske Willerslev, en el marco del proyecto 'ERC Synergy NEXUS1492', cuyos hallazgos se detallan en un artículo que se publica en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS).
Llegaron del Amazonas
El autor principal, Schroeder, de la Universidad de Copenhague (Dinamarca), quien llevó a cabo la investigación como parte del proyecto 'NEXUS1492', señala que es un hallazgo "fascinante". "Muchos libros de historia dicen que la población indígena del Caribe fue prácticamente aniquilada, pero quienes se autoidentifican como taínos siempre han abogado por la continuidad" -señala . "Ahora sabemos que tenían razón desde el principio: ha habido alguna forma de continuidad genética en el Caribe".
Willerslev, que trabaja en el Colegio St. John de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) y la Universidad de Copenhague, apunta que "siempre ha estado claro que las personas en el Caribe tienen ascendencia indígena", pero que "debido a que la región tiene una historia compleja de migración, era difícil probar si esto era específicamente autóctono del Caribe, hasta ahora".
Los investigadores también pudieron rastrear los orígenes genéticos de los indígenas del Caribe isleño, demostrando que estaban más estrechamente relacionados con los grupos de habla arahuaca que viven en partes del norte de América del Sur en la actualidad. Esto sugiere que los orígenes de al menos algunas de las personas que migraron al Caribe se remontan a las cuencas del Amazonas y el Orinoco, donde se desarrollaron las lenguas arahuacas.
El Caribe fue una de las últimas partes de las Américas poblada por humanos desde hace unos 8.000 años. En el momento de la colonización europea, las islas eran un mosaico complejo de diferentes sociedades y culturas. La cultura "taína" era dominante en las Antillas Mayores y en partes de las Antillas Menores, así como también en las Bahamas, donde las personas eran conocidas como lucayanas.
Para rastrear los orígenes genéticos de los lucayanos, los investigadores compararon el antiguo genoma bahameño con conjuntos de datos genómicos publicados anteriormente para más de 40 grupos indígenas actuales de las Américas. Además, buscaron rastros de ascendencia indígena caribeña en las poblaciones actuales mediante la comparación del genoma antiguo con los de 104 puertorriqueños contemporáneos incluidos en el Proyecto 1000 Genomas. Se demostró que el 10-15 por ciento de ascendencia indígena de este grupo está estrechamente relacionado con el antiguo genoma bahameño.
Asimilación en lugar de extinción
Según indica Jorge Estévez, descendiente de los taínos que ayudó al equipo del proyecto, este descubrimiento muestra que "la verdadera historia es de asimilación" y no "de extinción total". "Aunque esto puede haber sido una cuestión de investigación científica para ellos, para nosotros, los descendientes, es verdaderamente liberador y edificante", apunta Estévez, que dice sentirse realmente agradecido con los investigadores.
Aunque las comunidades indígenas del Caribe se basaban en las islas, los investigadores encontraron muy poca evidencia genómica de aislamiento o endogamia en el genoma antiguo. Esto refuerza la investigación genética anterior liderada por Willerslev, que sugiere que las primeras comunidades humanas desarrollaron redes sociales sorprendentemente extensas.
"La evidencia arqueológica siempre ha sugerido que un gran número de personas que colonizaron el Caribe eran originarias de América del Sur y que mantuvieron redes sociales que se extendieron mucho más allá de la escala local -afirma por su parte el profesor Corinne Hofman de la Universidad de Leiden e investigador del proyecto 'NEXUS1492'.
"Históricamente, ha sido difícil respaldar esto con ADN antiguo debido a la mala conservación, pero este estudio demuestra que es posible obtener genomas antiguos del Caribe y eso abre nuevas y fascinantes posibilidades para la investigación".