Un equipo de paleontólogos que trabaja en los yacimientos de Orce (Granada) ha descubierto los restos de una especie de lobo hasta ahora desconocida, un ejemplar que vivió en este entorno hace 1,6 millones de años llamado 'Canis orcensis', más carnívoro y que pesaría entre 15 y 20 kilos.
Un equipo de paleontólogos liderado por el investigador del Institut Català de Paleoecologia Humana y profesor asociado de la universidad Rovira i Virgili (URV), Bienvenido Martínez-Navarro, ha descubierto esta nueva especie de lobo de pequeño tamaño, entre 15 y 20 kilos.
El hallazgo, del que ha informado en un comunicado el instituto catalán, se enmarca en los trabajos de campo realizados en Venta Micena, uno de los yacimientos de Orce datado en 1,6 millones de años de antigüedad y que conserva uno de los mejores registros paleontológicos de fauna de grandes mamíferos cuaternarios de Europa.
La nueva especie descrita por el equipo de Martínez-Navarro se ha denominado 'Canis orcensis' en homenaje a la localidad de Orce. El descubrimiento, que se publica en la revista Comptes Rendus Palevol, suma una reconstrucción del pequeño lobo de esta especie realizada por Antonio Monclova.
El equipo ha reinterpretado todos los restos fósiles del yacimiento correspondientes al género Canis y ha comprobado que sus datos anatómicos y métricos difieren de los registros del lobo clásico.
"La nueva especie identificada en Venta Micena es diferente, pues se caracteriza por una dentición con tendencia a la hipercarnivoría, lo que indica que consumía más carne de vertebrados que otros cánidos del Pleistoceno inferior de tamaño similar, cuyos hábitos dietéticos eran más omnívoros, con mayor consumo de vegetales", ha detallado Martínez-Navarro.
Esta conclusión, basada en el estudio comparado de su morfología craneodental, se apoya también en evidencias geoquímicas como la abundancia de isótopos estables de nitrógeno en los fósiles que indican unos hábitos bastante carnívoros para el pequeño lobo.
Venta Micena es un yacimiento paleontológico con unas dimensiones únicas en el que, según los cálculos de los expertos, se conserva más de un millón de metros cuadrados con restos paleontológicos, con un promedio de registro de más de 60 fósiles por metro.
"Probablemente se trate del yacimiento paleontológico más rico del Cuaternario del mundo", ha resumido el coordinador de este equipo de trabajo.
La variedad de especies ha permitido que el yacimiento haya sumado durante medio siglo numerosos estudios de índole taxonómica, taxonómica, biogeoquímica o ecológica, algunos con gran proyección científica.