Mientras que en España los termómetros marcan máximas de temperatura, el mercurio ha bajado en Argentina hasta donde no lo había hecho nunca. De manera simultánea, los dos países se encuentran atravesando una ola de calor y otra de frío respectivamente.
A ambos lados del charco las temperaturas han sido tan crudas que han causado muertes. En España, un trabajador de 54 años fallecía el día 13 de este mes por un golpe de calor en Morón de la Frontera (Sevilla) mientras asfaltaba una carretera a más de 42ºC de temperatura. En Argentina, han sido cuatro las personas que han perecido por culpa del frío. Tres de ellos se encontraban viviendo en la calle en la localidad de Mar de Plata, mientras que el otro fallecido habitaba en la localidad de Rafaela.
Según denuncia Greenpeace y corrobora un estudio publicado en la revista Nature en el año 2014, estos dos sucesos estarían muy relacionados. Tanto el informe, realizado por investigadores de la Northeastern University de Boston, como un comunicado de la ONG en su sección de Argentina, relacionan el aumento de los episodios de temperaturas extremas con el cambio climático.
El trabajo, realizado por científicos norteamericanos, sostiene que el aumento de la temperatura en el planeta Tierra provoca el deshielo del Polo Norte, y esto a su vez produce un descenso brusco de masas de aire helado que tienen como consecuencia estas olas de frío.
Martín Prieto, director ejecutivo de Greenpeace Argentina, advierte de que las "temperaturas extremas como estas muestran la necesidad imperativa de actuar rápido. Las autoridades deben tomar medidas urgentes para mitigar los efectos del cambio climático".
En la localidad argentina de Bariloche se ha batido el record histórico de frío del país con -22,4ºC, según afirma en un comunicado el Servicio Meteorológico Nacional de Argentina. En este mismo documento se alerta a la población de un incremento de las "perturbaciones" que tendrá lugar desde el día 19 y se deben a un sistema de alta presión.
Por otra parte, en España también se ha roto el record de temperatura recientemente. En el municipio cordobés de Montoro se registraron 47,3ºC el pasado día 13, un pico al que nunca se había llegado desde que se tienen registros.
Olas de calor mortales
El crecimiento de las temperaturas debido al exceso de CO2 en la atmósfera provocaría olas de calor mortales en gran parte del planeta según una investigación liderada por el biólogo colombiano de la Universidad de Hawai (EEUU) Camilo Mora.
En su estudio, Mora apunta que el aumento de temperatura de la Tierra es ya imposible de parar, pero que según cómo se actúe al respecto el escenario dentro de unos años podría variar sensiblemente.
Los principales países afectados serían los más cercanos a la línea del Ecuador, es decir, las zonas de America Central, África y gran parte de Asia. En el peor de los escenarios posibles, habría grandes zonas que padecerían más de 300 días al año de calor extremo, lo que resultaría "potencialmente mortal".
Para evitar estos resultados catastróficos, la única opción es prevenir. Ángel Rivera, ex meteorólogo de la AEMET, ha mostrado recientemente en su blog la preocupación que le despiertan los picos tan altos de temperaturas.
Rivera invita a la reflexión sobre el fenómeno del cambio climático e insta a los gobiernos a llevar a cabo estrategias energéticas, medidas de adecuación e incluso políticas de salud pública al respecto.