La odisea de Rocky, la búho que viajó escondida en el árbol del Rockefeller Center
El famoso árbol de Navidad acaparó miradas en Nueva York esta semana no solo por su aspecto, sino por la sorpresa que traía entre sus ramas.
29 noviembre, 2020 00:52Noticias relacionadas
Rocky, la pequeña búho que la semana pasada acaparó la atención de los neoyorquinos (también en España) tras ser localizada oculta entre las ramas del famoso árbol de Navidad del Rockefeller Center, ha sido soltada en la naturaleza tras pasar varios días en un centro de rehabilitación de animales salvajes.
El árbol acaparó miradas esta semana no solo por su aspecto, más deslavazado que otros años, sino por la sorpresa que traía escondida entre sus ramas: un pequeño búho. El ave, cuyo tamaño no supera los 12 centímetros, recorrió más de 270 kilómetros (170 millas) oculta en un imponente abeto noruego que fue talado en la localidad de Oneonta y trasladada por carretera hasta la Gran Manzana, donde fue descubierta por uno de los profesionales encargados del árbol.
Rocky's release was a success! She's a tough little bird and we're happy to see her back in the wild. She will feel your love & support through her journey south.#RockefellerOwl Please help us continue our mission to help birds like Rocky for years to come https://t.co/Wg4S9kJZbb pic.twitter.com/AJZ5xPrVQt
— Ravensbeard Wildlife Center (@Ravensbeardorg) November 25, 2020
Los últimos momentos en cautividad de la búho, un espécimen adulto de la especie Saw-whet y que fue bautizada con el nombre de Rocky, han sido compartidos por el centro "Ravensbeard Wildlife" que editó un video en el que se ve cómo su cuidadora la saca de una caja en mitad de un bosque.
Las imágenes también muestran cómo, tras permanecer el ave unos momentos posado sobre la mano de la cuidadora, en los que incluso búho y mujer parecen mirarse, alza el vuelo para posarse en un árbol.
"La liberación de Rocky ha sido un éxito, es una pequeña y dura ave y nosotros estamos contentos de haberla devuelto a la naturaleza. Sentirá nuestro amor y nuestro apoyo en su viaje (migratorio) hacia el sur" aseguró la directora y fundadora de Ravensbeard, Ellen Kalish, en un breve mensaje difundido en las redes sociales este miércoles.
"Se realizó al atardecer para que pudiera encontrar un lugar seguro para cuando se hiciera de noche. Encontramos un lugar idóneo y tranquilo, una zona de coníferas, para darle la seguridad que necesita", escribió Kalish en Facebook, donde a lo largo de estos días ha compartido varias imágenes del ave nocturna.
El video y las fotos, sobre todo las de su llegada al centro, en una caja de cartón y después cómodamente abrigada con una manta, fueron compartidas por miles de personas y han contribuido a recaudar más de 17.000 dólares para la organización.
Vuelta a la libertad
Cuando el 17 de noviembre llegó al Ravensbeard Wildlife Center, la búho estaba en buenas condiciones "pese a todo lo que había pasado" y el hecho de que llevaba sin comer ni beber unos tres días, por lo que fue agasajada nada más llegar con fluidos y "todos los ratones que pudiera comer" antes de descansar para pasar una evaluación del veterinario, según informó el centro en su página web.
Los búhos de la especie Saw-whet, según explicó Kalish, "buscan una nueva pareja cada año y son resilientes buscando nuevos lugares seguros".
De acuerdo con el diario New York Post, los representantes de Rockefeller Center señalaron que cada año inspeccionan cada rama del gran árbol individualmente antes de envolverlo y trasladarlo, pero muchas veces hay pájaros que "acaban haciendo el viaje" hasta Nueva York.
Rocky ha causado casi más sensación que el propio árbol de 22 metros, que se ha llevado decenas de comentarios burlones en las redes sociales por su follaje irregular, con bromas al estilo de que se ha "cortado el pelo él mismo" y que representa perfectamente un abrupto 2020 marcado por la pandemia y las elecciones.