La racha de estabilidad y altas temperaturas para la época que ha caracterizado el mes de octubre de 2021, con la excepción de las fuertes precipitaciones en el noroeste y el sureste mediterráneo, llega a su fin durante el puente de Todos los Santos. Aunque esto vaya a ayudar a corregir el déficit de lluvias que está caracterizando este año hidrológico, la posibilidad de chubascos torrenciales pone en alerta a varias provincias durante estos días.
Según explica el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Rubén del Campo, el temporal se produce por la irrupción de "un río atmosférico", provocado por "la retirada del anticiclón que permitirá la llegada hasta la Península de vientos muy cargados de humedad, tras recorrer largas distancias sobre el Atlántico, dando lugar a varios días lluviosos en buena parte de la Península, especialmente en su mitad occidental".
Según expone Del Campo, estos "flujos de vientos húmedos y templados", transportan "grandes cantidades de vapor de agua desde zonas tropicales y subtropicales a latitudes medias", lo que se traduce en "lluvias abundantes". En cuanto a las temperaturas, descenderán a partir del viernes aunque "serán altas para la época en el Mediterráneo".
Este jueves, la llegada de un sistema frontal "abrirá la espita para el cambio del tiempo de los próximos días y la llegada del mencionado río atmosférico". Así pues, las primeras lluvias llegarán a Galicia y puntos próximos de Asturias y León. Se experimentará también "una marcada diferencia entre la noche y el día", con algunas heladas débiles en zonas de páramos y de montaña, mientras que en el Valle del Guadalquivir a primeras horas de la tarde se superarán los 26 o 27 grados.
El viernes, este primer sistema frontal irá avanzando y dejando precipitaciones en la mayor parte de la Península, aunque probablemente sin alcanzar todavía a la Comunidad Valenciana, la Región de Murcia, Andalucía oriental y Baleares. Por el contrario, en Galicia, oeste de Castilla y León, Extremadura y también en el extremo occidental de Andalucía, las precipitaciones serán localmente fuertes y persistentes, "pudiendo en algunos casos acumular más de 15 litros por metro cuadrado en tan sólo una hora o más de 40 litros por metro cuadrado en doce oras".
El sábado llegarán los vientos muy cargados de humedad (el llamado 'río atmosférico'), alerta el portavoz, que traerán "gran cantidad de vapor de agua tras haber recorrido largas distancias sobre el Atlántico, y volverá a llover en buena parte del país". Ese día también llegarán las lluvias a las regiones mediterráneas peninsulares y a Baleares, aunque de forma más débil que al resto del territorio pues serán la zona centro y la mitad sur de la Península las que recibirán las lluvias más abundantes.
En algunos casos, estas lluvias estarán acompañadas de tormentas en algunos puntos del sur de Castilla-La Mancha y del oeste de Andalucía, donde podrían registrarse a lo largo de la jornada más de 50 o 60 litros por metro cuadrado. "Lluvias abundantes después de un mes de octubre muy seco, y el domingo será muy probablemente de nuevo una jornada plenamente otoñal en la mayor parte de la Península, con lluvias abundantes sobre todo en la mitad occidental aunque serán menos frecuentes en Baleares y puntos del sureste", ha añadido Del Campo.
El viernes, sábado y domingo también se esperan rachas muy fuertes de viento, sobre todo en zonas costeras y de montaña. En cuanto a las temperaturas, el aumento de la nubosidad en la madrugada del viernes hará que la madrugada del viernes sea notablemente más templada que la de días anteriores. Sin embargo, la mayor presencia de nubes dejará temperaturas diurnas "acusadamente más bajas, sobre todo en la mitad occidental peninsular" y se "reducirá mucho la amplitud térmica".
En el Mediterráneo, en cambio, las temperaturas diurnas subirán un poco el viernes, pero el sábado se invertirán los papeles y bajarán mientras que subirán en el resto de la Península. Ya el domingo, "la subida será generalizada", como ha avanzado el portavoz, que ha añadido que desaparecerán las heladas nocturnas pues "prácticamente no se bajará de los cinco grados en ningún punto de la Península y el domingo las temperaturas máximas podrían incluso superar los 25 o 27 grados en las regiones bañadas por el Mediterráneo".
El 1 de noviembre, día festivo en toda España, aumenta la incertidumbre en el pronóstico aunque "es posible que continúen los cielos nubosos con lluvias en buena parte de la Península, pero, eso sí, ya más débiles e intermitentes que en días anteriores, menos intensas y que afectarán sobre todo a la zona centro y mitad sur", según Del Campo.
En cuanto a Canarias, Del Campo ha indicado que "queda al margen de la situación de precipitaciones" ya que los vientos alisios aflojarán estos días. "Habrá algunos intervalos nubosos en el norte de las islas y también habrá posibilidad de que crezcan nubes de evolución en el resto de las zonas, con algún chubasco disperso y ocasional en las horas centrales del día", explica.