La primera semana de mayo comienza con una "inestabilización de la atmósfera en la Península y Baleares y lluvias generalizadas", sobre todo durante el lunes y el martes, con precipitaciones, abundantes e incluso fuertes en el norte y centro peninsular, y más intensas en la vertiente Mediterránea.
Durante estos días se espera un ambiente "algo frío para la época", con diurnas entre 4 y 8 grados por debajo de los valores registrados el domingo, avanza Rubén Del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
A partir del miércoles, se prevé "una lenta pero progresiva tendencia a la estabilidad", aunque es probable que se mantengan los cielos nubosos y las lluvias en el norte, mitad oriental y Baleares, y que continuarán el jueves y el viernes en el área cantábrica, Pirineos y norte del área mediterránea.
Hacia el final de la semana, y aún con incertidumbre, se prevé un tiempo seco y soleado, salvo en el norte peninsular y en el área mediterránea, donde persistirá una alta probabilidad de lluvias, y con temperaturas que subirán desde el miércoles para estabilizarse hacia el fin de semana.
Semana de 'locura'
"Estamos ante una semana en la que la inestabilidad de nuevo será la protagonista del panorama meteorológico, y todo apunta a que los aguaceros podrían descargar con fuerza en algunas zonas del país", explica por su parte en su blog Samuel Biener, meteorólogo de Meteored.
El lunes, las tormentas serán localmente intensas en el Pirineo, Aragón, sistema Central, Ibérico sur y en el interior este y sureste, con tendencia a desplazarse hacia el este, alcanzando Baleares. "En la vertiente cantábrica podrían producirse algunas lluvias, mientras que por la tarde podrían caer algunos chaparrones en Andalucía occidental. En el resto, intervalos nubosos o cielos poco nubosos, con el alisio arreciando en Canarias".
El martes, la depresión en altura estará centrada sobre el entorno del Golfo de Cádiz, explica Biener. "Además, una pequeña baja en superficie que se situará sobre las Pitiusas ayudará a que lainestabilidad sea acusada en la primera mitad del día en el norte de la Comunidad Valenciana y en Tarragona, donde las precipitaciones podrían ser puntualmente fuertes y persistentes". Durante la tarde las nubes crecerán con fuerza, descargando chubascos tormentosos en muchas zonas del centro, sur, Baleares y en el Pirineo.
La nieve podría caer por debajo de los 2000 metros por el norte, y entre los 2200-2500 en el sur, explica. Las temperaturas bajarán en la vertiente mediterránea y subirán por el norte. En Canarias la situación será idéntica a la del día anterior. El miércoles, el embolsamiento de aire frío se dirigirá hacia el este, cruzando el mar de Alborán, mientras que en superficie se intensificará el viento del noreste. Las precipitaciones serán puntualmente fuertes en el sureste, especialmente en la Región de Murcia y Almería.
El jueves la inestabilidad irá a menos, aunque durante las primeras horas las precipitaciones podrán ser intensas en Melilla. Todavía quedarán algunos chubascos residuales en el sureste y Baleares, con tendencia a retirarse. Durante la tarde podrían producirse algunas tormentas dispersas en zonas de montaña del este. Las temperatura subirán de forma generalizada, excepto en los archipiélagos. "En Sevilla, Córdoba y Badajoz las máximas rondarán los 30 ºC", concluye.