España atraviesa un episodio histórico de calor. Como alerta la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), desde este martes, el país convive con la presencia de un aire muy cálido y seco que está causando "temperaturas excepcionalmente altas" para esta época del año. La masa de aire africana ha hecho una entrada progresiva en nuestro país y será durante este jueves y el viernes cuando alcance su punto más álgido.

Según detalla el organismo, es muy probable que el jueves se superen los 32-34º en buena parte del interior sur peninsular y valle del Ebro y los 30º en el valle del Duero. Mientras, en el Cantábrico y Galicia, aunque las temperaturas serán anormalmente altas, superando los 25ºC en las zonas del interior, no se espera que se alcancen los 30ºC.

Como informa el físico del aire y divulgador científico José Miguel Viñas para Meteored, los puntos más críticos durante el jueves se vivirán en la zona sur peninsular, sobre todo en Sevilla y Córdoba, donde se espera que se alcancen los 38ºC de máxima.

Con mayor incertidumbre, se prevé que durante el viernes las temperaturas máximas sigan ascendiendo en la mitad este peninsular y Baleares. Continuarán por encima de los 36ºC en el valle del Guadalquivir y de los 32-34ºC en la mitad sur peninsular. Es probable también que se sobrepasen los 30-32ºC en el valle del Ebro e interior de Mallorca. "Veremos si en alguna estación meteorológica se llegan a superar los 40ºC. Sería un hito en el mes de abril", apunta Viñas. 

Será durante el fin de semana cuando se renovarán las temperaturas y comiencen a llegar vientos húmedos y frescos del Atlántico. No obstante, la AEMET avisa de que las temperaturas seguirá ascendiendo en el extremo este peninsular y Baleares. Pasado "lo peor" de la ola de calor, todavía podrían sobrepasarse los 32ºC en el valle del Ebro e interior de Mallorca y los 34ºC en zonas determinadas de Málaga, Almería, Murcia y Alicante.

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"Las elevadas temperaturas previstas para el jueves y viernes de esta semana en diversos puntos de la Península no son, en absoluto, una situación habitual para esta época del año. Se trata de algo muy inusual y se pueden batir récords en diversas estaciones", advierte el meteorólogo facultativo del Centro Nacional de Predicción de AEMET, Ricardo Torrijo, a SMC España.

Noches tropicales

El experto pone especial atención a los valores que se vaticinan para el valle del Guadalquivir, aunque matiza que "todavía hay algo de incertidumbre en las temperaturas que se pueden alcanzar".

Para Marco Santandreu, físico y meteorólogo de RTVE, sería más normal ver estas temperaturas en julio y agosto. Como repara en el medio citado: "Si las previsiones se cumplen, esperamos batir récords de temperaturas en numerosas capitales. Y no por décimas, sino de largo. Un calor intenso y extenso que también se va a trasladar tras la puesta de sol, con noches tropicales previstas en diferentes municipios".

Efectivamente, se estima que las temperaturas mínimas serán anormalmente altas en todo el país, especialmente durante las madrugadas del jueves al sábado en Andalucía, donde se advierten noches tropicales sin bajar de los 20ºC.

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Efectos como estos han conseguido poner sobre la mesa un problema que ronda sibilino el día a día: el cambio climático. Como aclara Santandreu, "este episodio está atribuido a una masa de aire excepcionalmente cálido para la época y no a efectos locales y orográficos, que a veces son capaces de disparar las temperaturas en determinadas áreas".

Atención al cambio climático

"El anuncio por parte de AEMET de las temperaturas anormalmente altas para esta época del año que se esperan para los próximos días es consistente con los efectos del cambio climático, repetidamente anunciados desde las instancias científicas fundamentalmente representadas por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el cambio Climático (IPCC, de sus siglas en inglés)", apostilla Ernesto Rodríguez, meteorólogo superior del Estado y miembro de la Asociación Meteorológica Española (AME).

A su juicio y en base a lo esclarecido por el IPCC, "todavía estamos a tiempo de enderezar el clima con medidas sostenibles, decididas y mantenidas en el tiempo". De no hacerlo, lamenta que "fenómenos extremos como este serán cada vez más habituales y nos golpearán con mayor contundencia".

Su clama se une a la del resto de expertos citados, que creen fervientemente que estos eventos extremos se produdirán con mayor frecuencia en el futuro. Este verano no se pinta mejor que el anterior, caracterizado por varios episodios de calor extremo. "Esto que ahora es algo extraño, que es noticia, dejará de serlo desafortunadamente en unos años. Porque nos acostumbraremos, porque al haber pasado anteriormente, no se hablará de ello", sentencia Santandreu.