La peor dieta para 2019: 7 kilos menos a la semana pero con grave riesgo para la salud

Ya llevamos algo más de un mes de 2019. Las comilonas de Navidad acabaron y dejaron paso -seguramente- al famoso propósito de año nuevo de seguir una dieta para bajar los excesos de estos atracones o los kilitos de más acumulados en 2018. Entre las dietas que se habrán planteado cientos de españoles para el nuevo año, seguramente, más de una sea peligrosa para la salud.

Para descubrir una dieta que permita reducir la curva abdominal se puede recurrir al todopoderoso Google. Si escribimos dieta obtendremos decenas de resultados de distintos métodos para adelgazar. El problema es que a priori no se sabe si son sanas. Entre tanta información, el Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) señala cuál es la peor dieta para 2019: la 'dieta de las 800 kilocalorías' (kcal).

Esta dieta limita la ingesta calórica diaria a las 800 kcal, recortando entre un 60% y un 70% la ingesta recomendada cada día (oscila entre 1800 y 2200 kcal) y prometiendo reducir en una semana entre cinco y siete kilos (según la constitución de cada uno). Lo que no indica es que "pone en riesgo la salud de los pacientes que la siguen", explica Estefanía Ramo, nutricionista de IMEO a EL ESPAÑOL.

Esta dieta, calificada como la peor para 2019 por IMEO, "no tiene ningún fundamento científico", según la experta: "Es muy restrictiva, monótona e hipocalórica". Además, es insuficiente para mantener activo un organismo joven. Para consumir solo 800 kcal se restringen al máximo todos los macronutrientes fundamentales que necesita el organismo como son los hidratos de carbono, las proteínas y las grasas. En concreto, estas dietas pueden consistir en "estar a base de caldos, con un poquito de carne y un poquito de pescado", ejemplifica Ramo.

Asimismo, la nutricionista alerta de los riesgos para la salud que conlleva seguir esta dieta tanto a largo como a corto plazo, además del efecto rebote que se puede producir. Como situaciones más inmediatas apunta que se pueden padecer mareos y, a largo plazo, "el paciente puede llegar a sufrir numerosos riesgos para la salud, desde carencias nutricionales a alteraciones en la conducta alimentaria como menos saciedad y más hambre".

"Los pacientes también pueden sufrir modificaciones en el metabolismo, lo que puede producir que se quemen menos calorías en esta dieta, y que si el paciente quiere hacer otras dietas de pérdida de peso, que le cueste más al organismo reducir la grasa". Además, "si esta dieta se prolonga en el tiempo, se pueden producir trastornos de la conducta alimentaria, en casos extremos se ha podido dar anorexia y bulimia". 

A pesar de los riesgos, que puede observar uno mismo al comprobar la poca cantidad de comida que se ingiere al día, la gente recurre a este tipo de dietas "porque está muy desesperada por perder peso de forma rápida, pero a costa de la salud. Estos pacientes no quieren aprender a comer", afirma la experta. "Lo que buscamos siempre en consulta es que el paciente se reeduque nutricionalmente y eso hay que enseñárselo", destaca Ramo.

La experta apunta a que la popularidad de estas dietas tan perjudiciales llegan porque celebrities como Kylie Minogue, Renée Zellweger o Jennifer Aniston la han seguido. "Me imagino que estas famosas seguirán la dieta durante muy poquitos días, no a largo plazo, pero el resto de la gente que la siga a largo plazo pone en riesgo su salud"- señala.

Asimismo, explica que han analizado otras dietas que no son exactamente igual que las de las 800 kcal pero que también tienen mala fama y riesgos para la salud, como son las dietas de los tés detox y los cafés adelgazantes. En estas, la pérdida de peso "es muy similar y las carencias nutricionales y el riesgo para la salud también es muy parecido", denuncia la nutricionista.

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