El aguacate es uno de los productos de moda. Por ello, cada vez es más frecuente encontrarlo como ingrediente en multitud de platos. Esta fruta, originaria de centroamérica, ofrece no solo un sabor muy agradable, sino unas propiedades muy beneficiosas para nuestro organismo, entre los cuales incluyen mejorar la digestión, disminuir el riesgo de depresión y proteger la salud cardiovascular, entre otros.
Si esto fuera poco, un reciente estudio ha demostrado que otra ventaja de consumir esta fruta originaria de Centroamérica, es reducir de forma segura la resistencia a la insulina y, por tanto, ayudar a prevenir la diabetes tipo 2. La causa de esta esperanzadora propiedad la encontramos en una una molécula de grasa que solo se puede encontrar en el aguada: la avocatina B.
Esta es la conclusión de un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Guelph, en Canadá, cuyo resumen ha sido publicado en la revista Molecular Nutrition & Food Research.
El páncreas produce una hormona llamada insulina, que es la que se encarga de procesar con éxito la glucosa o azúcar en la sangre. Sin embargo, en las personas que sufren diabetes tipo 2, el cuerpo no no produce suficiente hormona o no puede usarla de manera efectiva, por lo que no pueden realizar de forma natural este procesamiento. Algo que en las personas que no sufren esta enfermedad sin diabetes, este procesamiento ocurre con la ayuda de la hormona pancreática insulina.
Esta situación puede dar lugar a que quede demasiada glucosa en la sangre, un estado poco saludable que, si no se controla, puede causar una serie de problemas graves, como enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y daños en los riñones o los nervios.
Los autores del estudio afirman que la resistencia a la insulina, ocurre cuando las mitocondrias en las células no pueden quemar los ácidos grasos a través de la oxidación lo suficiente. En diabetes, esa oxidación es incompleta. Sin embargo, la investigación realizada sugiere que la avocatina B ayuda a finalizar el proceso de oxidación de ácidos grasos mitocondriales en el músculo esquelético y el páncreas, de tal forma que la oxidación de las grasas es completa. El resultado es que su existencia en nuestro organismo mejora la tolerancia y la utilización de la glucosa, aumentando la sensibilidad a la insulina.
Con los estudios realizados, el equipo investigador se ha puesto en marcha para diseñar ensayos clínicos para evaluar la efectividad de avocatina B. Además, también ha recibido la autorización de Health Canada para vender esta molécula en forma de polvo y pastillas, lo que esperan poder llevar a cabo en el plazo de un año.
Propuestas para comer aguacate
Si bien es cierto que se espera que en un tiempo este tipo de pastillas y polvos estén disponibles, al menos en algunos países, mientras tanto, comer aguacate es una buena forma de que las personas con diabetes doten a su organismo de la avocatina B. Para ello, existen numerosas recetas en las que este fruto verde juega un papel destacado y que, además, pueden resultar muy saludables.
Una receta muy sencilla que puede servir para desayunar o como tentempié a lo largo del día es la tostada de aguacate. Un aguacate cortado o mantequilla de aguacate, acompañada de queso fresco y tomate y sobre pan integral es una deliciosa y saludable forma de matar el gusanillo. Además, es muy fácil combinarlo con otras verduras y condimentos favoritos.
Otra fórmula, que en España puso de moda Mercadona es la del hummus de aguacate. Aunque por regla general los productos caseros suelen ser más saludables. De tal forma, si te atreves con ello, puedes agregar un aguacate machacado al hummus, lo que permitirá aumentar la cantidad de fibra y grasas saludables. Eso sí, como acompañamiento es mejor olvidarse de los panecillos y optar por las crudités, como zanahorias y palitos de apio o de pepino.
Las ensaladas es otro de los platos en los que el aguacate casi siempre encaja. Una opción muy sana es la de ensalada de atún con aguacate. En este caso, es mejor olvidarse de salsas como la mayonesa. Para darle algo más de consistencia, sin renunciar a que sea un plato saludable, puedes añadir frutos secos crudos, como nueces o pipas.
Una última opción, si eres de aquellos a los que les gusta picar patatas fritas, ya sea en la comida o entre horas, con el aguacate puedes tener un genial sustituto de estos poco saludables aperitivos. Corta a pedazos los aguacates, rebozarlos en harina, sumergirlos en huevo y panko y, por último, meterlos en el horno hasta que se vuelvan dorados y crujientes
Como vemos, el aguacate es una fruta muy especial, que ofrece importantes beneficios a quienes la consuman. Su versatilidad lo hacen apropiado para preparar cualquier tipo de receta y a cualquier hora del día. Tanto las personas con sufren diabetes, como las que no, el aguacate es un alimento cuyo consumo habitual es más que recomendable.