Aunque la investigación científica lleva ya tiempo desmintiendo que el consumo de huevos aumente el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, esta falsa creencia aún está bastante extendida entre la población en España y en todo el mundo y, en consecuencia, aún hay gente que limita su consumo semanal de huevos.
Pero un reciente metaanálisis (un análisis de diferentes estudios sobre el mismo tema, por lo que sus conclusiones son las más completas) no solo desmiente de nuevo la idea de que el huevo es poco saludable, sino que concluye que comer más de un huevo al día se asocia con una reducción significativa del riesgo de enfermedad de las arterias coronarias.
Esta es la principal conclusión de una reciente revisión, publicado en la revista médica The American Journal of Medicine, en el que los investigadores han revisado los estudios observacionales, desde 1966 hasta enero de 2020, sobre la posible relación entre el consumo de huevos y las enfermedades cardiovasculares. En total se identificaron 23 estudios prospectivos (que duran cierto número de años) en este caso con una mediana de seguimiento de 12 años. En ellos participaron más de 1.415.000 personas (más de la mitad de origen chino y estadounidense), entre los que se registraron más de 157.000 eventos de enfermedad cardiovascular (enfermedad de las arterias coronarias, insuficiencia cardíaca, infarto agudo de miocardio y casos de accidente cerebrovascular).
Pues bien, según esta revisión, las personas que toman más de un huevo al día no enfrentan un riesgo significativamente mayor de padecer una enfermedad cardiovascular que aquellas que solo toman un huevo al día o ninguno. Es más, todo lo contrario: tomar más de un huevo al día se asoció con un riesgo significativamente menor de sufrir un tipo enfermedad arterial coronaria, en comparación con aquellos que no toman huevo o que solo consumen uno al día. O sea, que según esta revisión, el huevo tiene entre la población general un papel más protector que perjudicial sobre la salud del corazón.
Dicho esto, ¿en qué consiste la enfermedad arterial coronaria? Según explican desde la web de la Clínica Mayo, se trata de una dolencia que afecta a los vasos sanguíneos que irrigan el corazón. Se produce, generalmente, por la acumulación de placa (depósitos que contienen colesterol) en las arterias, lo que hace que estas se estrechen y que se vaya reduciendo el flujo de sangre que va al corazón. "Con el tiempo, la reducción del flujo sanguíneo puede causar dolor de pecho (angina de pecho), falta de aliento u otros síntomas. Una obstrucción completa puede causar un ataque cardíaco".
Según señala este nuevo análisis, "hasta la fecha, los estudios sobre el consumo de huevos y la enfermedad de las arterias coronarias, incluidos los metanálisis, han sido inconsistentes". Sobre lo que sí hay ya una evidencia clara es de que no aumentan el riesgo de enfermedad cardiovascular en general. Por ejemplo, un análisis, publicado en la revista European Journal of Nutrition en 2018, como explica este artículo de EL ESPAÑOL, concluyó que se pueden comer un huevo al día sin problema. Otra revisión publicada en The BMJ ya lo señalaba en 2013. Así, este reciente análisis se suma a la amplia lista de artículos científicos que desmienten que el huevo sea poco sano.
El mito del colesterol
Pero entonces, ¿a qué viene tanta mala prensa? Pues bien, el huevo es rico en colesterol pero, según explican desde la web de Fundación Hipercolesterolemia Familiar (FHF), al contrario de lo que se ha pensado siempre, el consumo de huevo no está ligado con un aumento importante de colesterol sanguíneo. Son las grasas saturadas y trans las principales responsables (presentes en bollería industrial, platos precocinados, patatas fritas, entre otros) de este problema.
"Aunque la mayor parte de los alimentos ricos en colesterol suelen ser también ricos en grasas saturadas, el huevo no lo es. Un huevo de tamaño medio contiene unos 200 mg de colesterol, pero tiene más grasas insaturadas, beneficiosas para la salud, que saturadas", señalan desde la FHF.
Para concluir, más allá de los citado beneficios sobre la salud del corazón, ¿qué más aporta este alimento al organismo? Se trata de una fuente de proteínas de calidad, también es bajo en calorías y contiene casi todas las vitaminas, salvo la C, y varios minerales como el hierro, fósforo y selenio. También aporta antioxidantes (selenio, vitamina E, carotenoides), ácido fólico y colina.
Las enfermedades cardiovasculares suponen la principal causa de muerte en el mundo, según la OMS, unos 7,7 millones de personas fallecieron por este motivo en 2015. Como recuerdan desde esta organización los ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares suelen tener su causa una combinación de factores de riesgo: tabaquismo, obesidad, inactividad física, consumo de alcohol, la hipertensión arterial o la diabetes.
Así, además de incluir en la dieta los huevos, para prevenir estas patologias lo mejor es llevar una dieta sana, abundante en frutas y verduras, y hacer deporte regularmente.