Aunque España suele ser conocida en el mundo por sus tapas, pequeños bocados con diversos ingredientes que suelen servirse acompañando a las bebidas, en formato snack, la realidad es que nuestro país también destaca por muchas otras cualidades gastronómicas, como las guarniciones.
En este ámbito, un nuevo estudio habría sugerido que una guarnición muy popular en España sería incluso más saludable de lo que cabría esperar; no todo es sabor y textura cuando se opta por un ingrediente para acompañar al plato principal.
Se trata de los hongos. Y es que, según la reciente investigación publicada en Food Science & Nutrition, agregar una sola porción de hongos aumentaría significativamente el consumo de varios micronutrientes esenciales.
Una de las guarniciones más nutritivas
Victor L. Fulgoni III y Sanjiv Agarwal analizaron la hipotésis de que consumir una porción de hongos como acompañamiento de determinados platos podría proporcionar beneficios hasta ahora poco conocidos. Para ello, usaron datos de la Encuesta Nacional del Examen de Salud y Nutrición (NHANES) 2011-2016 llevada a cabo en EEUU.
Se fijaron concretamente en el efecto de hongos blancos, champiñones crimini y setas portabella; también analizaron hongos expuestos a luz ultravioleta -un procedimiento al que se someten algunos precisamente para mejorar sus cualidades nutricionales-, y finalmente estudiaron el consumo de hongos ostra en poblaciones de entre 9 y 18 años y mayores de 19 años. En todos los casos, se definió una porción como 84 g o "media taza".
Se descubrió que consumir 84 g de la combinación de hongos blancos, crimini y portobella, o bien una porción de hongos ostra, aumentaba el consumo de potasio y fibra de forma significativa.
Por otro lado, el consumo de porciones de 84 g de hongos aumentaba de forma significativa diversos tipos de micronutrientes: hasta un 5-6% de fibra, un 24-32% de cobre, un 6% de fósforo, un 12-14% de potasio, un 13-14% de selenio, un 5-6% de zinc, un 13-15% de riboflavina o vitamina B2, un 13-14% de niacina o vitamina B3 y un 5-6% de colina. Sin embargo, no hubo un impacto significativo en el consumo calórico, de carbohidratos, grasas o sodio.
inalmente, cuando se consumían hongos expuestos a luz ultravioleta para proporcionar 5 mcg de vitamina D por porción, la ingesta de esta vitamina podía alcanzar e incluso superar el valor diario recomendado (98-104%) tanto en adolescentes como en adultos, además de poder reducir la insuficiencia de este nutriente en la dieta. Solo con una porción de 84 g de hongos al día.
Hongos, un alimento olvidado
Como bien recuerda Mary Jo Feeney, MS, RD, FADA y coordinadora de investigación nutricional del Mushroom Council, responsable de esta investigación, estos datos ya se sospechaban: añadir hongos a la dieta cotidiana es una forma fácil y efectiva de alcanzar los objetivos dietéticos recomendados por las guías nutricionales.
Los hongos son un miembro del tercer reino alimentario, diferentes a los alimentos animales o vegetales, aunque se suelan consumir y usar como si perteneciesen a este segundo grupo.
Según los datos de Food Data Central, cinco hongos blancos crudos (unos 90 g de alimento) tan solo contienen 20 calorías, pero proporcionan 3 g de proteínas, 0 g de grasa, 0 mg de sodio y hasta 23.6 mcg de vitamina D (118% de la dosis recomendada de esta vitamina para un día).
Por suerte, la visión general que se tiene de los hongos como si fuesen una guarnición vegetal más, ha logrado que su consumo haya ido aumentando progresivamente durante estos años. Así, se ha logrado mejorar los datos de consumo de micronutrientes y acercarse poco a poco a las recomendaciones nutricionales, sin aumentar el consumo calórico, de ácidos grasos saturados o de sodio, los cuales deberían reducirse significativamente dado que en la actualidad se está dando un claro abuso de los mismos en la dieta.
En los próximos años, el grupo de investigación Mushroom Council, compuesto por productores o importadores del mercado de productos frescos, tienen pensado continuar investigando acerca de los valores nutricionales y beneficios del consumo de hongos en la población general.