Aunque parezca increíble, el chocolate negro en España ha desbancado en ventas al chocolate con leche de toda la vida. Y es que los beneficios del chocolate negro han sido ya ampliamente comprobados. ¿Lo hemos incluido ya en nuestra dieta o todavía nos cuesta acostumbrarnos a ese sabor amargo tan característico que tiene? ¿Sabemos realmente elegir uno que sea bueno y saludable?
Como todo en nutrición, pese a sus beneficios, no es oro todo lo que reluce y es importante, también en esto, hacer una buena elección: no todos los chocolates negros son igual de saludables. Como sabemos, lo más recomendable es comprar una tableta de chocolate negro superior al 85% de cacao o como mínimo del 70%.
Cuanto más cacao tenga la tableta, menos azúcar llevará. Como explicó en este artículo la nutricionista Blanca Garcia-Orea (más conocida como @blancanutri), un chocolate negro con un 70% de cacao tendría 29 gramos de azúcar por tableta de 100 gramos; un chocolate 85% de cacao llevaría unos 15 gramos de azúcar por tableta de 100 gramos; y uno con 90% de cacao llevaría unos 7 gramos de azúcar por una tableta de 100 gramos. Sin embargo, cuando hablamos de chocolate con leche, estamos hablando de tabletas que tendrían únicamente un contenido de cacao de un 45%, y el resto es azúcar, es decir, más de la mitad de la tableta sería azúcar.
Edulcorantes
Pero además de fijarnos en el contenido de caco que lleve nuestra tableta de chocolate negro, es importante también fijarnos en otros datos para no equivocarnos en nuestra elección. ¿Qué pasa con las tabletas de chocolate negro 0% azúcares? ¿Serían también una buena opción?
“El problema es que el chocolate negros 0% azúcares no lleva azúcar pero sí muchos edulcorantes”, afirma a EL ESPAÑOL la dietista-nutricionista Natalia Moragues, CEO del Centro de Medicina y Nutrición Alvida (Sevilla). “Cuando hablamos de tabletas de chocolate negro normalmente casi todas ellas contienen edulcorantes, por lo que sería importante una vez más, mirar el etiquetado del producto, y mirar si llevan o no”, aclara la experta.
No pasa así con el cacao en polvo (sobre todo de ciertas marcas comerciales) es decir, con los cacao desgrasados en polvo. Por lo que el cacao puro en polvo desgrasado sin azúcar añadido sí sería recomendable. “Si lo que buscamos es un aporte muy bajo o casi nulo de azúcar, podemos comprar cacao puro en polvo desgrasado ‘sin azúcar añadido’”, tal y como aconsejaba por su parte el Instituto Centta de Madrid en una nota de prensa -con motivo del Día Mundial del Cacao-.
Pero “cuando es el chocolate negro en tableta y no el cacao en polvo es ‘sin azúcar añadido’, la mayoría de las veces va a llevar edulcorante para endulzar. Y el problema está en que el más utilizado es el maltitol apareciendo incluso a veces el primer ingrediente de la lista lo que implica el de mayor cantidad en la tableta. El maltitol no es recomendable para personas con patologías intestinales como colon irritable. Si lo tomamos de forma continuada puede provocarnos hinchazón abdominal, diarrea y otros síntomas gastrointestinales”, añadían desde este centro.
Sabor más dulce (y no tan amargo)
Otros de los problemas que tendría comprar una tableta de chocolate negro 0% azúcares añadidos tendría que ver con nuestra tolerancia para soportar el sabor amargo que tienen el chocolate negro.
Como explica Moragues, “la mejor elección sería comprar un chocolate negro normal (sin 0% azúcares añadidos) porque aquí el demonio no es el azúcar, el problema está en que estamos enganchados a los dulces. Por lo que, con una tableta de un chocolate negro normal de 85% de cacao y 15% de azúcar, tomaremos en realidad poco azúcar, porque además no solemos comer más de una o dos onzas. Así, sería sería preferible tomarnos este chocolate que tiene un un sabor ligeramente más amargo, aunque lleve azúcar, a tomarnos un chocolate negro que tenga un sabor más dulce. Porque un chocolate negro 0% azúcares añadidos con 85% de cacao, pese a tener 85% de cacao, lleva muchos edulcorantes y al final nuestro paladar lo notará mucho más dulce, aunque no lleve azúcar”. Es decir, nuestro paladar notará más dulce un chocolate negro 0% azúcares añadidos que uno normal.
Y lo importante realmente con el chocolate negro es que nuestro paladar se acostumbre a ese sabor amargo que tiene el chocolate negro, que será más amargo a mayor porcentaje de cacao, y por tanto menor porcentaje de azúcar. De modo que el mejor camino para empezar a tomarlo, es empezar por un chocolate negro del 70% de cacao para ir poco a poco subiendo ese porcentaje, “hasta mínimo llegar a un 85% de cacao, que mínimo seamos capaces de tolerar ese sabor”, finaliza Moragues.