Vaya por delante una sencilla máxima: la mejor barrita de cereales o frutos secos es la que no nos tomamos. Los productos que encontramos a la venta y que se comercializan como apoyo para el ejercicio físico o como tentempié 'saludable' para quiénes no tienen tiempo para desayunar o comer en condiciones tienen un peor perfil nutricional que sus ingredientes por separado. Es frecuente que añadan azúcares, enmascarados como jarabes o siropes, o 'alternativas naturales' como la miel que tampoco suponen una incorporación saludable.
"La gente suele tomárselos para conseguir un chute inmediato de energía al hacer deporte, pero no son tan sanos como la gente piensa ni comparables al aporte que nos puede dar un plátano o unos frutos secos", valoraba para EL ESPAÑOL Miguel Ángel Martínez-González, catedrático de Salud Pública de la Universidad de Navarra. Una mejor opción para incorporar calorías y carbohidratos de calidad y origen vegetal serían el famoso plátano de los deportistas, los dátiles o los frutos secos.
Sin embargo, la materia prima importa a la hora de determinar cuál es la 'menos mala' de las barritas que podemos adquirir, según el análisis realizado por la revista Consumer en su edición de marzo de 2021. "En algunas barritas se aprecia fácilmente la presencia de cereales enteros, como en Hero Muesly o Nature Valley; en otras destaca la presencia de frutos secos, como en El Almendro o Bekind, y otras están recubiertas de ingredientes que cuesta identificar, como Chocokrispies de Kellogg’s o Golden Grahams", valoran los autores.
La inspección visual no es determinante, sin embargo: "Es importante consultar el etiquetado, porque a veces el aspecto o los mensajes del envase pueden llevarnos a engaño", avisa la revista especializada en consumo. El primer dato a reseñar es que, al no existir una legislación específica, el fabricante puede jugar con el nombre y el contenido. Así, Hero Avellanas sugiere que su principal ingrediente son los frutos secos, pero son los cereales, a los que se añaden trozos de avellana.
Otro caso curioso es el de la barrita Eroski Frutos Secos Chocolate Negro. Pese a la enumeración de ingredientes que le da nombre, el elemento principal es en realidad una legumbre: lleva un 25% de cacahuete. No se trata de una incorporación insana, como las ya mencionadas de azúcares en distintas formas o de chocolate con leche, pero es la demostración de lo difícil que es saber qué nos estamos llevando realmente a la boca cuando consumimos uno de estos productos.
Precisamente en el apartado de calidad, destacan las que contienen más frutos secos por el mero hecho de que dejan menos espacio a otros ingredientes nocivos. En ese sentido destacan Bekind, con un 76% de almendras y anacardos, y El Almendro, con un 61% de almendras y avellanas. Las siguientes en el escalafón serían las barritas de cereales integrales, que van a aportar más fibra y a producir un menor pico glucémico de azúcares en sangre. Consumer señala a Nature Valley y Hero Muesly, con un 59% y un 48% de avena respectivamente.
Lo más frecuente, sin embargo, es que se mezclen ingredientes de distintas calidades. "Es el caso de Kellogg’s chocolate con leche, que contiene 37,5% de trigo y avena, además de harina de trigo integral y harina de arroz; de Nestlé Fitness, con un 30,2% de trigo y avena integrales, un 14,5% arroz refinado y un 4,4% de harina de trigo integral; o de Golden Grahams, con un 25,6% trigo y avena integrales, un 8,9% de harina integral de trigo y un 5,1% de sémola de maíz y de harina de arroz", recoge el análisis de la revista.
Esto lleva a que las barritas con más frutos secos y menos mezclas, Bekind y El Almendro, sean las que más proteínas y grasas saludables aporten a cambio de menos azúcar, que ronda o supera el 30% en Eroski cereales, Nestlé Fitness, Nature Valley y Hero Avellanas. Sin embargo, las peores de la lista serían las elaboradas por completo con cereales refinados, como es el caso de la barrita Chocokrispies de Kellogg’s. Aunque obtiene una nota mejor en el semáforo nutricional Nutriscore que otras, una 'C' frente a las 'D' predominantes, hablamos de un producto que es básicamente arroz refinado inflado, azúcar y cacao.
Ni siquiera puede afirmar que contiene chocolate, porque no lo tiene, solo su "sabor". Desde Consumer invitan a fijarse en la calidad del alimento antes que en el aporte energético: "No es lo mismo obtener 420 kcal a partir de 100 g de Chocokrispies de Kellogg’s (...) que ingerir 594 kcal a partir de 100 g de barritas El Almendro". La barrita de Chocokrispies es "claramente insana" y no recomendable para "un consumo habitual, mucho menos en el caso de la población infantil, el rango de edad al que va destinado ese producto concreto".