Frente a todos estos malos hábitos de alimentación, hay que potenciar el consumo de alimentos ricos en antioxidantes, ya que estos nos ayudarán a contrarrestar el estrés oxidativo causante de la inflamación y el daño de los tejidos.
Según la citada experta, los aportes extra de nutrientes antioxidantes como las vitaminas C y E, la provitamina A y los minerales zinc y selenio, que ayudan a la producción de colágeno -proteína responsable de la elasticidad de la piel previniendo su envejecimiento- deben estar también presentes en esa alimentación para ralentizar el envejecimiento.
¿Qué alimentos contienen estos nutrientes? Las frutas frescas, como frutos rojos o cítricos, las verdura, como el pimiento rojo rico en vitamina C y aquellas de hojas verdes, frutos secos y semillas con alto contenido en vitamina E, minerales y omega 3, té verde (matcha) rico en antioxidantes, y cúrcuma y jengibre por sus propiedades antiinflamatorias, según Mireia Benlliure.